Gobernador interino solo serviría para aguantar la tienda: Castellón Fonseca

03 / Febrero / 2016

Por: Bertha Alvarez

Ni al estado, ni a los nayaritas les favorece la designación de un gobernador interno porque únicamente se estaría propiciando un congelamiento en los planes de desarrollo y se prolongarían los enfrentamientos políticos en pos de la elección sexenal.

Al perredismo no le convence el interinato porque el que llegue solo serviría para aguantar la tienda en preparativo del proceso que homologaría la elección del primer cargo estatal con los comicios a la Presidencia de México del 2024.

Este análisis forma parte de la agenda que el Comité Directivo del PRD y su grupo parlamentario integran en las propuestas que formularán en la reforma política que estaría homologando la constitución y ley electoral local con las generales aprobadas por el Congreso de la Unión en 2014.

El presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Francisco Javier Castellón Fonseca, leyó en sus mediciones que no están de acuerdo en el nombramiento de un gobernador interino porque considera que éste no podría hacer mucho en un año perdido para el desarrollo del estado.

No habría proyecto alguno por el cual votar, no habría condiciones de un modelo de gobierno. Solamente sería el gobierno que aguarde el lugar a un nuevo gobernador. Es un año perdido porque si de por si cuando es un gobierno de seis años, el primero y el sexto son perdidos, el primero por el aprendizaje, el ultimo por la retirada, pues un año es de entrar y salir.

Nayarit será la última entidad que habrá de empatar la reforma política aprobada por las cámaras de Diputados y Senadores, transformación que formó parte del paquete de reformas del presidente de México, Enrique Peña Nieto como parte del paquete que incluyó las reformas a las leyes energética, educativa, de telecomunicaciones y la medular para la vida democrática del estado: la política.

Entrevistado su oficina del segundo piso del Comité Directivo Estatal del PRD, con agudo análisis, el presidente del PRD, sostuvo que un año de interinato se consumiría en los tres primeros meses de recepción, tres de entrega y un semestre que implicarían estrategias de corto y mediano plazo que solo haría que se prolongará la efervescencia política de un estado ya de por sí muy politizado.

Creo que los partidos, diputados, la propia sociedad entera a la cual se le debe de invitar a estas discusiones deberá de reflexionar muy bien sobre como empatar las elecciones estatales con las federales que en metamorfosis serán reguladas en su fiscalización por el Instituto Nacional Electoral (INE).

Para el grupo de Castellón Fonseca es más factible dividir la elección a gobernador en cuatro y tres años, como ya se ha hecho en otros estados donde finalmente se logró empatar el proceso constitucional local con el federal.

Puede ser que Nayarit sea uno de los estados que dividan los años que nos quedan para empatar las elecciones presidenciales en dos periodos, uno de cuatro y otros de tres años. Ahí quizá sea un poco más congruente.

Sin embargo, se debe considerar primero es que existen las condiciones, dijo el líder del partido amarillo, en una reflexión que por escrito entrará al debate de la discusión en el periodo legislativo que inicia este 18 de febrero.

Una segunda propuesta –adelanta- es la conveniencia de mantener la elección de regidores o regresar al sistema de planillas, coincidente con el legislador, Pavel Jarero, porque consideran que con el actual modelo político los regidores se sienten tan dueños de su territorialidad que de cierta forma hacen que se pierda la gobernabilidad en los Ayuntamientos.