70% de amenazas a periodistas son por medios electrónicos: FEADLE

* PGR ofrece curso a reporteros para aprender a detectar riesgos, a cómo guardar distancia de personajes con poder que posteriormente pueden ser generadores de amenazas.

11 / Julio / 2016

Por Oscar Verdín Camacho

El viernes ocho, a instancia de la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR), funcionarios de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos en Contra de la Libertad de Expresión (FEADLE), ofrecieron un curso a reporteros locales en instalaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Se trata de información básica que puede ser útil para la disminución de riesgos en el oficio periodístico: cómo saber detectar factores o interpretar mensajes.

Se explicó que las estadísticas muestran que aproximadamente el 70 por ciento de las amenazas a periodistas se realizan a través de medios electrónicos: celular, correo, redes sociales como Facebook, Twitter, entre otros, por lo que, cuando ello ocurre se sugiere denunciar el hecho y no mover el mensaje, no reenviarlo, para que los peritos de la FEADLE puedan realizar un mejor rastreo.

De igual forma fue citado que la amenaza a periodistas generalmente proviene de individuos con poder: servidores públicos, políticos, policías, narcotraficantes, con el objetivo de censurar publicaciones.

Igualmente fue explicado que, según casos de agresiones a periodistas que no denunciaron previamente amenazas, ello pudo deberse al miedo, desconocimiento o para no enfrentarse a aspectos burocráticos.

Se insistió que se cuenta con medidas de protección que pueden llegar, incluso, a sacar de un estado a un periodista y resguardarlo en un albergue, si existiera riesgo a su integridad.

Una de las partes más importantes de la exposición tuvo que ver con el aspecto de la distancia que permite un periodista para delimitar su espacio y mantenerlo en reserva. Es decir, qué tanto deja que otras personas se acerquen demasiado a él por distintas circunstancias –económicas, de amistad, en función de favores- y que posteriormente le cobren factura.

Mantener una distancia con individuos de poder permitirá una mayor protección en la función reporteril. Si no existe esa distancia, es probable que disminuya la calidad de los trabajos cuando se aborde a esos personajes y las instituciones que encabezan.

Otra sugerencia importante por parte de funcionarios de la FEADLE tiene que ver con la información que el propio comunicador ventila en redes sociales, principalmente sobre la identificación de su familia, puesto que se convierten en datos que el agresor toma para facilitar la amenaza. Identificar por su nombre, rostro, o el lugar donde estudia un hijo, son errores que no deberían incurrir los periodistas, y de hecho ninguna persona que maneje información sensible, se insistió.

Y por supuesto también se sugirió el cuidado de la redacción en las notas que son presentadas; no caer en adjetivos, en ofensas. Ello siempre ayudará en la disminución de riesgos.