LA GUILLOTINA:_ AFLUENZA, LA ENFERMEDAD DE LOS NIÑOS RICOS

Por Lic. Javier Durán

11 / Noviembre / 2016

Ethan Couch, joven estadounidense que con apenas 13 años de edad conducía una camioneta a 110 kilómetros por hora cuando la velocidad permitida en esa calle del estado de Texas era de solamente 65, mató a 4 personas y dejó herida a 9 más, sin que su crimen fuera castigado con cárcel, ya que solamente fue sentenciado a 10 años de libertad condicional y a rehabilitación.

Durante el juicio, se pudo comprobar que esto adolescente, su porcentaje de alcohol en sangre era tres veces superior a lo que en Texas se considera índice de embriaguez, por lo que el fiscal pidió para Couch 20 años de prisión.

Sin embargo, solamente fue hallado culpable de homicidio involuntario por intoxicación y sentenciado a 10 años de libertad condicional y a rehabilitación.

La juez Jean Boyd aceptó como atenuante el principal argumento de la defensa: que el joven —entonces de 13 años— sufría afluenza, la enfermedad de los niños ricos.

¿De qué se trata esta enfermedad y por qué este muchacho no fue encarcelado pese a todo lo malo que hizo?

El psicólogo clínico Dick Miller, explicó que el acusado, miembro de una de las familias más acaudaladas del estado, era víctima de unos padres irresponsables que lo habían malcriado.

De acuerdo al psicólogo, los padres de Couch dejaron que prácticamente se criara solo, sin ninguna regla ni límite, y jamás lo castigaron.

Como ejemplo, este psicólogo durante el juicio contó que le habían regalado la camioneta a los 13 años, a pesar de que ya había tenido problemas con la ley, ya que en otra ocasión, los policías lo habían encontrado con una adolescente inconsciente y semidesnuda en el vehículo y pese a eso no enfrentó ningún juicio

Como consecuencia de ello, el experto aseguró durante el juicio que Couch sufría afluenza, una condición por la que no era capaz de medir ni entender las consecuencias de sus actos.

En nuestro país, hemos sido testigos de este tipo de padecimiento en hijos de políticos y de personas acaudaladas económicamente hablando.

El caso de Daphne Fernández, una menor del estado de Veracruz que en enero de 2015 fue obligada por cuatro conocidos suyos a subir a un auto, el Mercedes Benz de uno de ellos, para llevarla al domicilio de uno de los agresores y violarla, fue ampliamente difundido por los medios de comunicación y dibujó de cuerpo entero la impunidad que reina en México con personas adineradas y la clase política que abusan de los más desprotegidos.

Estos chicos, conocidos como Los Porkys de Costa de Oro, formarían parte de un grupo que actúa desde hace años en varios puntos del estado con graves antecedentes como el asesinato de un muchacho de 15 años en una fiesta en 2001. Estos angelitos también se les relacionan con otros delitos y pese a eso, siguen gozando de los privilegios que el dinero les puede comprar.

Jorge Emilio González, mejor conocido como Niño verde es un ejemplo típico de este tipo de abusos de los que diariamente somos testigos. Este niño rico en en 2004 lo vincularon con actos de corrupción, luego de que se publicara una videograbación entre él y un intermediario de un grupo de inversionistas en la que aceptaba una oferta por dos millones de dólares para la creación de hoteles dentro del corredor turístico de Cancún, Quintana Roo. González Martínez comenzó a ser investigado el 4 de marzo de ese año por la PGR, sin embargo en octubre fue absuelto de los delitos por consideras que no hubo prueba de los ilícitos derivado del video en donde se le implicaba.

En el ámbito local, este tipo de conductas se han presentado más veces de lo que nos imaginamos, ya que también muchos nayaritas han sufrido lesiones e incluso perdido familiares por culpa de estos niños ricos que circulan a toda velocidad en sus autos de lujo, bajo el influjo del alcohol y de sustancias prohibidas, sin que hasta el momento hayan recibido castigo por parte de nuestras autoridades.

Los mirreyes de Nayarit siguen sembrando el terror cada que se les antoja con una impunidad que da miedo.

Mi correo: guillotinakora@yahoo.com.mx