Sacrílegos roban la sagrada imagen de la Virgen de Guadalupe

26 / Junio / 2017

Por José María Castañeda

Santiago Ixcuintla.- La siembra de garbanzo como cultivo alternativo tronó como ejote tierno dicen campesinos del poblado de Otates, ante la falta de asesoría técnica luego que está jamás se vio entre los ejidos que se animaron a producir el cultivo.

Fuentes que pidieron que se les guardara el anonimato, mencionaron que al cultivo de garbanzo se le dio mucha importancia ya que era un cultivo alternativo y de contrato donde el productor saldría beneficiado además que se mencionaba que este cultivo no requería de mucha agua a la hora de regar, por lo que el ahorro en el pago de riego comparado con los cultivos tradicionales como el tabaco que requiere de hasta 5 riegos, el frijol dos y hasta tres riegos, el arroz que requiere de grandes cantidades de agua, así como la caña de azúcar por lo que el ahorro en el pago de riegos se reduciría hasta en un 50 por ciento.

Sin embargo la realidad fue diametralmente opuesta ya que quienes nada más aplicaron un riego tuvieron una cosecha por hectárea consistente en cuando mucho 300 kilos, mientras que quienes aplicaron de dos a tres riegos lograron cosechar hasta 500 o 600 kilos por hectárea, esto de ninguna manera fue el resultado que se esperaba ya que como ya viene siendo costumbre en los agricultores no sacaron ni los gastos de producción, faltando aún lo mejor ya que los probables compradores de garbanzo no aparecen por ninguna parte. Por lo que de nueva cuenta engañan falsos redentores a los campesinos Nayaritas, nada más dijeron las fuentes que las personas que nos iban a comprar la producción vayan a salir como los de Granissa, que con el señuelo de que iban a comprar la totalidad de maíz amarillo, lo único que hicieron contando con el VB de los ejidatarios que estamparon su firma en el contrato que firmaron con los propietarios de la empresa Granissa, estos bajaron un apoyo federal que los hizo construir el almacén con elevador de gusano y todo que se localiza metros antes de llegar al poblado de Amapa. Sea por Dios con esta gente que no se cansa de chingar a nuestra gente del campo.