José María Castañeda .-
Muy activo se vio ayer lunes al nuevo responsable del alumbrado público municipal, Ulises Murillo, quien estuvo supervisando el cambio de luminarias en las escalinatas del Cerro Grande. Murillo, quien ya había ocupado este cargo en administraciones anteriores, estuvo acompañado por su equipo de trabajo.
Explicó al reportero que varias luminarias se vieron afectadas tras una reciente tormenta, en la que ráfagas de viento derribaron un frondoso árbol que cayó sobre los cables del alumbrado, dejando prácticamente toda la zona sin luz. Afortunadamente, señaló que gracias a la generosa aportación del presidente municipal, Sergio González García, y de los regidores, entre los que se incluye el odontólogo Enrique Macedo Romero, las luminarias serían reparadas.
El cuerpo edilicio, junto con el presidente municipal, está trabajando arduamente para atender los problemas prioritarios del municipio, como el aseo público y el bacheo de calles. En relación a esto último, el alcalde, conocido como El Pipiripau, mencionó en una entrevista que los albañiles del ayuntamiento han dejado temporalmente de barrer las calles para dedicarse al empedrado de aquellas que lo necesitan.
Esta iniciativa ha sido bien recibida por la ciudadanía, que ve en el trabajo de El Pipiripau y los regidores una fuente de esperanza y progreso para el pueblo.