Santa Marta, Colombia. Los bombardeos que Estados Unidos ejecuta en el mar Caribe y el Pacífico, que sin pruebas justifica en su guerra contra los carteles del narcotráfico de América Latina, gravitaron este domingo en la primera jornada de la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión Europea (UE), que se celebra en esta ciudad colombiana.
No es un tema que pasa desapercibido y se espera que este lunes en la declaración final de la cumbre haya una referencia expresa sobre el asedio de Washington contra supuestos narcoterroristas.
En la sesión de apertura se reclamó un diálogo diplomático sobre la soberanía de los pueblos.
Aquí esperamos que se pueda dar un espacio en el que se hable de los ataques que se han realizado desde Estados Unidos, afectando a los pescadores del Caribe y el Pacífico, dijo el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva antes de su llegada a Santa Marta.
La unidad de los pueblos, el respeto de los derechos humanos, fortalecer la autodeterminación y el diálogo entre iguales, es el dique de contención a la ola del gran capitalismo que amenaza la democracia, dijo su par de Colombia, Gustavo Petro, anfitrión y presidente protempore de la Celac.
Quiero que la Celac sea un faro de luz en medio de la barbarie y que demuestre que encontrarnos y dialogar aún es posible, subrayó.
Al inaugurar el encuentro, Petro destacó que la bandera sigue siendo la misma, una humanidad libre y una democracia global que permita nuestra diferencia de todo tipo que son nuestra riqueza. Una humanidad unánime es una humanidad muerta.
Aquí hay un diálogo de civilizaciones y puede ser ejemplo para el mundo, añadió y resaltó que es posible una humanidad en la diferencia, subrayó.
Recordó las luchas por la libertad en el Caribe, y denunció los recientes ataques en el Caribe de Estados Unidos, que volvió a calificar como ejecuciones extrajudiciales, al referirse a la muerte de un pescador identificado como Alejandro Carranza.