La marcha de médicos y estudiantes por agresión a doctora

22 / Octubre / 2012

Por Óscar Verdín Camacho

¡Yo no seré la siguiente víctima!, es la frase que se repetía en cartulinas que mostraron estudiantes de medicina de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), el viernes 19, durante una marcha para protestar por la agresión que sufrió una pasante que ofrecía su servicio social en el centro de salud de El Macho, municipio de Tecuala.

¡Malditos!, eso es lo que pensé, indica una de las jóvenes, cuestionada sobre el primer sentimiento que pasó por su mente al saber del ataque. Que feo, no se entiende que la muchacha haya ido a dar un servicio a la comunidad y que le haya pasado esto.
Yo salvo tu vida, tú que haces por la mía, se leía en otro mensaje.

Otra muchacha, apunta a este reportero:
Siento indignación y mucho coraje. Siento tristeza por ella, porque la comunidad no valoró sus servicios. Es indignante. A todos nos ha impactado, a nuestras familias, mi mamá dice que no se imagina que me pase algo así.

Una estudiante de segundo año exclama:
Me da coraje que las autoridades actúen hasta que pasan las cosas, que no haya medidas de prevención; muchas de las veces los prestadores de servicio piden cosas simples y no se les atiende. Al contrario, les dicen que si no están a gusto, que renuncien.

Siento repudio, indignación, señala un joven estudiante. Según indica, hace unos cuatro años se empezó a dar seguimiento a la situación de los pasantes de medicina que prestaban servicio, pero la medida fue suspendida posteriormente.

Todos de blanco, la marcha inicia poco después de las nueve de la mañana en la escuela de Medicina; son cientos de alumnos, encabezados por directivos del plantel.

De los campos universitarios caminan hasta oficinas de salud frente al Ingenio Menchaca. Ahí se detienen unos minutos y rezan un Padre Nuestro.

La caminata sigue por avenida Insurgentes hasta el Hospital General, donde continúa internada la agraviada y luego a la Secretaría de Salud.

Oscar Villaseñor Anguiano, titular de la dependencia, indica la toma de medidas de protección, como la de mayor seguridad en los centros de salud –en puertas y ventanas- o el de comprometer a los ayuntamientos y a las comunidades a garantizar la seguridad del personal médico.

La citada agresión, que provocó la presencia del secretario de Salud federal Salomón Chertorivski, motivará no sólo cambios en el estado sobre la situación de los prestadores de servicio, sino a nivel nacional, para garantizar su seguridad.

Durante la marcha, en distintas partes de Tepic el tráfico vehicular fue interrumpido, pero no hubo una sola protesta de los conductores. Nadie pitó. Y es que al advertir las batas blancas que identifican a médicos y, en este caso, a estudiantes, era fácil de relacionar el por qué de la manifestación.
Y es que la indignación es unánime.