Insistentes, aunque más tenues los diputados

30 / Noviembre / 2012

Por Óscar Verdín Camacho

A pesar de que era obvio que la sesión del mediodía de ayer en el Congreso del Estado estaría bajo especial revisión, luego de que el martes el diputado priísta Emilio González Macías soltó la frase ¡que viva Roberto Sandoval!, otros integrantes de la bancada del PRI no se quedaron con las ganas y, aunque con menor vigor, acomodaron frases acorde al discurso que se dicta en Palacio de Gobierno, quedando lejos su representación que los obliga a dar equilibrio al ejercicio del Poder Ejecutivo.

Al menos esa posición adoptaron los diputados Víctor Eloy Jiménez Partida y Carlos Alberto Saldate Castillón al hacer uso de la tribuna. Éste último, por ejemplo, consideró que la obra pública que realiza la administración de Sandoval deja constancia de que está haciendo historia en el presente, frase que busca posicionar el gobierno estatal.

Saldate –compadre de Sandoval- indicó que obras como el bulevar de la colonia Gobernadores y la avenida Aguamilpa muestran la vocación de servicio del gobernador contra las voces de incrédulos y necios.
Pidió dejar de lado cuestiones políticas y respaldar a nuestro gobernador.
En el caso de Víctor Eloy Jiménez, no se metió en improvisaciones y se concretó a leer un discurso, reconociendo al gobernador por apoyar a los que menos tienen y por dar justicia para el campo.

La sesión estuvo relacionada con el análisis del primer informe de gobierno en rubros de trabajo, desarrollo económico, obras públicas, desarrollo rural, turismo y medio ambiente.
Miguel Ángel Arce Montiel, del PRD, consideró la urgencia para que el gobierno impulse estrategias integrales que den equilibrio a las demandas sociales; recordó que hay muchas comunidades en el estado con alta marginación y se quejó de que se dificulte el acceso a vivienda a personas que no cuentan con las facilidades de quienes gozan con trabajo estable.

Arce Montiel lamentó que mientras por un lado se presume el turismo de los adinerados, atrás de ello hay historias oscuras de despojos de tierras y daños al medio ambiente, o no existe el mismo apoyo para la gente de la región, a quienes incluso se les cierran las ventanas al mar.
Recordó que Nayarit ocupa el lugar 30 en Producto Interno Bruto (PIB) y, para finalizar su intervención, comparó a Sandoval con el ex gobernador Ney González –a quien no mencionó por su nombre- respecto al derroche de dinero en publicidad que acompañó a su primer informe.

Sin embargo, el diputado Alejandro Galván Araiza, del PRI, aclaró que en realidad Nayarit ocupa el lugar 22 en PIB, en proporción por el número de habitantes, y que cuenta con la primera posición en percepción de seguridad.
Galván consideró que la gestión del gobernador, a un año de su inicio, ha sido con el pie derecho, ejemplificando que existen más de seis mil nuevos empleos después del 19 de septiembre del 2011 en que inició la administración.
También mencionó que Sandoval ha abordado temas difíciles como el del centro ceremonial Tatei Haramara, en la playa Isla del Rey, en el municipio de San Blas, e incluso mostró documentos que, dijo, corresponden a un título que dan seguridad para preservar el lugar, aunque el diputado independiente Santos Rentería aclaró que el reclamo de indígenas no es por tres ó 10 hectáreas sino por la zona que comprende Isla del Rey.

Galván ya había indicado, como dato curioso, que un ex alcalde de San Blas, del PAN, figura en una de las empresas que buscan hacer negocio en la región que ocupa el centro ceremonial. No dijo el nombre.

Pero las intervenciones de los legisladores, unos a favor, otros en contra tras la revisión del primer informe, motivaron que el diputado panista Carlos Carrillo Santana –ex priísta- cuestionara la metodología en cómo se desarrollan estas sesiones y a sabiendas de que la sociedad reclama saber la situación real en que se encuentra el estado.

Recordó, en clara referencia al gobierno anterior, que durante mucho tiempo se dijo que había un plan de desarrollo y que a Nayarit se le notabay de a cómo nos salió el chistecito.

Por ello, recordando a Juan Gabriel y a José Alfredo Jiménez, pronunció un pero qué necesidad y no caigamos en los mismos errores, para invitar a la legislatura a la necesidad de que se vea dónde estamos parados.
Indicó que no se trata de responsabilizar de todo al gobernador, o de las cosas que ocurrieron en otras administraciones, pero sí de señalar que las acciones se realicen en términos que marca la ley.

Por último, aunque adelantó que concluiría su intervención con una frase de Benito Juárez –que se le perdió en el papeleo-, sacó a luz otra, de repuesto pero no menos importante. La del político inglés Winston Churchill: el político se convierte en estadista cuando más que pensar en las próximas elecciones, piensa en las próximas generaciones