La Yunta : Segunda Profecía

¿Será el fin del mundo el 21 de diciembre?

Por Óscar Zúñiga (Segunda parte de tres)

19 / Diciembre / 2012


Surgirá el hombre con un altísimo nivel de energía interna, personas con sensibilidad y poderes intuitivos para la sanación, pero también aparecerán farsantes que solo pretenderán tener ganancias económicas a expensas de la desesperación ajena.

Al final del ciclo cada hombre será su propio juez, cuando el hombre entre al salón de los espejos para examinar todo lo que hizo en la vida, será clasificado por las cualidades que haya desarrollado en la vida, su manera de actuar día tras día, su comportamiento con los demás, y su respeto por el planeta, todos se ubicarán acordes a lo que sean, los que conserven la armonía comprenderán lo que sucede como un proceso de evolución en el universo, en cambio habrá otros que por ambición, miedo y frustración culparán a los demás o a Dios por lo que sucederá, se generarán situaciones de destrucción, muerte y sufrimiento, pero también se dará lugar a circunstancias de solidaridad y de respeto con los demás, de unidad con el planeta y el cosmos. Simultáneamente más personas encontrarán la paz, aprenderán a controlar sus emociones, habrá más respeto, serán más tolerantes y compresivas y encontraran la unidad, surgirán hombres con un altísimo nivel de energía interna, personas con sensibilidad y poderes intuitivos para la sanación, pero también aparecerán farsantes que solo pretenderán tener rédito económico a expensas de la desesperación ajena, los mayas predijeron que en 1999 comenzaría la era del tiempo del no-tiempo una etapa de cambios rápidos necesarios para renovar los procesos ideológicos sociales y humanos.

Esto implica que el cielo y el infierno se estarán manifestando al mismo tiempo, y que cada ser humano vivirá en el uno o el otro, dependiendo de su propio comportamiento, el cielo con la sabiduría para trascender voluntariamente a todo lo que sucede, el infierno con la ignorancia para aprender con sufrimiento, dos fuerzas inseparables, una que comprende que en el universo todo evoluciona hacia la perfección, que todo cambia, otra envuelta en un plano material que solo alimenta el egoísmo.

En la época del cambio de los tiempos, todas las opciones estarán disponibles, prácticamente sin censura de ninguna clase, y los valores morales serán más laxos que nunca, para que cada cual se manifieste libremente como es, la segunda profecía afirma que sí la mayoría de los seres humanos cambia su comportamiento, y se sincronizan con el planeta, se neutralizarán los cambios drásticos que describen las siguientes profecías; hay que ser consientes de que el hombre siempre decide su propio destino, especialmente en esta época, las profecías son solo advertencias para que tomemos conciencia de la necesidad de cambiar de rumbo para evitar que se hagan realidad.


Tercera profecía


La tercera profecía maya dice que una ola de calor aumentará la temperatura del planeta, produciendo cambios climáticos geológicos y sociales en una magnitud sin precedentes, y a una velocidad asombrosa, los mayas dicen que el aumento de la temperatura se dará por la combinación varios factores, uno de ellos generados por el hombre que en su falta de sincronía con la naturaleza solo puede producir procesos de auto destrucción, otros factores serán generados por el sol que al acelerar su actividad por el aumento de su vibración produce más que radiación, aumentando la temperatura del planeta.

Por esta advertencia de la tercera profecía de los Mayas, se hace impostergable y urgente un cambio de conducta en lo individual y colectivo para asumir el compromiso de la práctica cotidiana de acciones que ayuden a mejorar la ecología del planeta hasta lograr la plena armonía del actuar del ser humano con el entorno, a sabiendas de que el comportamiento del hombre será crucial para sobrellevar el aumento general de la temperatura causada por su propia conducta inconsciente y cada uno de nosotros en alguna manera ayudamos a contaminar al planeta o a desforestarlo, con nuestros automóviles, arrojando basura en las calles, o en los parques públicos ayudando a que el clima del planeta se vuelva en nuestra contra, los cambios están ocurriendo ya pero como han pasando muy lentamente, nos hemos adaptados a ellos y no percibimos el proceso de industrialización que tuvo lugar en el siglo XX.

Ha contaminado dramáticamente la atmósfera con sus emisiones de gases tóxicos, la llamada lluvia ácida producto de la quema de carbón o derivados del petróleo y de la emisiones de sulfuro y oxido de nitrógeno en el ámbito industrial tiene lugar en todo el mundo y se concentra en la áreas urbanas, corroe los monumentos y puentes, destruye la pintura exterior, mata los bosques, daña la vida marina, los suelos cultivados convierten el agua potable en tóxica y reduce la visibilidad. El aumento de la temperatura producirá fuertes vientos huracanes y tornados.

Los huracanes son tormentas gigantescas y violentas un vórtice de destrucción y muerte, se les llama huracán en conmemoración del Dios del mal de los aborígenes del Caribe, el Huracán Mich y los fenómenos asociados a la corriente del niño, son evidencia de la tendencia hacia los grandes desastres causados por el clima el sistema hidráulico es fundamental pues la tierra está cubierta en un 70 por ciento de agua, al aumentar la temperatura disminuirá la humedad relativa en el ambiente lo que traerá como consecuencia menos nubosidad en el cielo y mayor exposición al sol agravando así el problema.

Así se evaporará el agua de los suelos produciéndose grandes sequías y muchos incendios forestales en todo el planeta, la falta de agua producirá grandes inconvenientes en toda la vegetación, reduciendo su crecimiento y disminuyendo considerablemente el tamaño de las cosechas.

Al reducirse la cantidad de agua de lluvia también menguará el caudal de los embalses y lagos, creando serios problemas a toda la fauna de la tierra, todo esto causará un fuerte impacto en la economía, habrá desabastecimiento y muchos productos que dependen del clima como los forrajes, los cereales, el pescado y la energía hidroeléctrica subirán de precio de modo vertiginoso.

Serán épocas de racionamiento, hambre y descontento social, aumentará el número de plagas de insectos y las enfermedades tropicales como la malaria, el comportamiento del hombre será crucial para sobre llevar el aumento general de la temperatura causada por su propia conducta inconsciente y depredadora.