Prepotente Director de Coplademun, desdeña a la prensa

10 / Mayo / 2013

Por: Juan Fregoso

Acaponeta, Nayarit.-Algunos funcionarios públicos de la actual administración, eluden a los periodistas, sin darse cuenta que con esta actitud dan pie a malos entendidos y que después se hacen los dignos al sentirse agraviados por los señalamientos de los reporteros, que no hacen más que cumplir el deber de informar.

Tal es el caso del director de Coplademun, Julio César Montes Vizcarra, que cada vez que le solicitamos una entrevista toma el teléfono, se lo pega al oído y, sin mediar palabra, se sale de sus oficinas dejando a los reporteros con un palmo de narices. Montes Vizcarra, quien fue uno de los artífices de la destrucción de la Plaza, ni siquiera tiene la educación de decirnos ahorita no puedo o de plano no quiero dar entrevistas, por el contrario, adopta una postura de diva del firmamento hollywoodense vernáculo.

No buscamos a Julio César Montes Vizcarra para que pose ante nosotros como una estrella en decadencia del cine vodevilesco, si lo molestamos es porque es un servidor público y como tal está obligado constitucionalmente a proporcionar la información que requerimos para darla a conocer al pueblo, que tiene todo el derecho de saber lo que hacen sus funcionarios, porque con sus impuestos se les paga su sueldo.

Hay muchos temas que tratar con el director de Coplademun, algunos muy importantes para el conocimiento de la opinión pública, sin embargo, este señor, originario de Chilapa, municipio de Rosamorada, se da aires de grandeza y ve a los reporteros como pordioseros, quizá esta sea la razón por la cual no concede entrevistas, o al menos que oculte algo en el desempeño de sus actividades públicas.

El comportamiento de El Chilapa, como es conocido en la región, sólo exhibe su prepotencia, aunque en apariencia enseñe un rostro de humildad que está lejos de prodigar a la ciudadanía que merece respeto. Se le olvida a Montes Vizcarra que es un empleado del pueblo al cual debe rendirle cuentas de los trabajos que se estén ejecutando bajo su responsabilidad.

A Montes Vizcarra, quien pretende pasar como un servidor público intachable, o como la Madre Teresa de Calcuta, se le olvidan ciertos antecedentes que no hablan bien de él. Por ejemplo, se ha filtrado la especie de que el ingeniero intentó apropiarse indebidamente de 800 metros de rieles y una motoconformadora propiedad de la nación, por lo que ante situación contrató los servicios del abogado David Zamora Chávez, para que le tramitara un amparo y evitar ser detenido.

Entre otras lindezas que se le atribuyen al director de Coplademun, destaca el hecho de que cuando ostentó el mismo cargo en EL Nayar, incurrió en el probable delito de fraude, ya que en el informe que rindió en ese entonces figuraba la construcción de un camino sacacosechas, sin embargo dicha obra, por la cual cobró una fuerte cantidad, no fue ejecutada, fue una obra que sólo existió en los papeles. Por lo que se ve, la carrera burocrática de Julio César Montes está llena de sorpresas nada agradables, y que los archivos periodísticos mantienen celosamente guardados para recordarle su negro pasado, cada vez que sea necesario.

Con todo, el señor Montes Vizcarra pretende proyectar una imagen de funcionario honesto, blanco y puro, cuando todo indica que es un sujeto de dudosa solvencia moral y en cuyas manos está la gran responsabilidad de la elaboración de proyectos y obras en el Coplademun de Acaponeta, en donde no le será difícil, por la experiencia que tiene, cometer acciones corruptas como las que se le atribuyen. ¿Será por eso que no quiere dar entrevistas?