Delincuentes ni las canas del ex gobernador Toño Echevarría respetaron

26 / Julio / 2013

Por José María Castañeda

SANTIAGO.- La delincuencia en el municipio santiaguense está alzando límites increíbles luego que una de las víctimas, de quienes hace del robo su ‘modus vivendi’, es el ex gobernador del estado nayarita Antonio Echevarría Domínguez, al que le robaron de la casona que este tiene en la calle Bravo, esquina con Degollado, los aires acondicionados.

Lo anterior fue reportado al noticiero regional que conduce el licenciado Jesús Narváez Robles, por una miembro del ‘Clan Trujillo’, quien le dijo al comunicador que ella tiene un puesto con venta de bisutería frente al Jardín Juárez, en donde los amantes de lo ajeno hacen de las suyas (aprovechando que no hay vigilancia en el rumbo; porque él único policía que se encontraba de punto en el Jardín fue removido por el comandante Pelayo, a otro sitio).

A mi -dijo la señora Trujillo- me han robado muchas cosas de las que tengo en venta aprovechando los ladrones el menor descuido, sin embargo añadió la quejosa no nada más yo he sido víctima de la delincuencia aquí en el Barrio de la ‘Flauta’; sino también el propio ex gobernador del estado, Antonio Echevarría Domínguez, en su casa ubicada entre Bravo y Degollado. Este también sufrió el flagelo de los ladrones al haberse llevado los aires acondicionados que tenía en la vivienda. Donde por cierto por haber rentado la casa al parecer a una dependencia del IFE, esta contaba con vigilancia policiaca las 24 horas del día.

El robo en contra del ex gobernante; si viviera el director general de Express Edgar Arellano Ontiveros El Pipiripau original, hubiera sido motivo de burla y escarnio del comunicador ya fallecido.

No deja de alarmar a la ciudadanía el hecho de que los ladrones a casas habitación no hayan respetado ni las canas del llamado Tigre Toño, por lo anterior, con tanto ladrón suelto y con una policía que se declara incapaz de enfrentar a la delincuencia; bajo el pretexto de que no se cuenta con el número de policías que enfrenten de manera frontal a tanto mendigo rata, dijeron habitantes de este Santiago nuestro.