La comunicación entre padres e hijos, factor clave para su adaptación a la escuela: ISSSTE.

16 / Agosto / 2013

Tepic.- La integración al entorno escolar representa un elemento significativo en la vida del menor, por lo que éste se ve obligado a realizar un proceso de adaptación que genera cambios en su comportamiento. Estos cambios son transitorios y cederán a medida que el niño se acostumbre al nuevo ambiente, sin que para ello existan un periodo o velocidad específicos.

De acuerdo a la psicóloga de la Estancia Infantil No. 72 del ISSSTE, Lilia del Carmen Aguilera García cada niño posee una capacidad diferente para enfrentar nuevas situaciones, por lo que depende en gran medida de los padres de familia facilitar su adaptación al ambiente escolar que representa para el niño conocer nuevos espacios, convivir con otras personas adultas y sus compañeros de grupo.

Manifestó que, entre otros comportamientos, este escenario puede propiciar que el infante no quiera asistir a la estancia, que deje de comer o coma de más, que llore por las noches y esto ocasione que no duerma o que incluso duerma más tiempo para reponer el sueño perdido.

Ante esta situación la especialista recomendó platicar con el niño previamente en casa respecto de los motivos para asistir a la estancia y de los beneficios que encontrará en ésta. Es importante que los padres eviten engaños como esconderse en la entrada de la escuela cuando el pequeño no esté mirando o decirle que estará con él en la estancia.

Sugirió también despedirse alegremente del niño mostrando confianza de que será bien atendido y asegurarle que más tarde regresará por él para llevarlo casa. Es importante darle ánimos e interesarse en sus actividades, festejar sus logros y recordarle continuamente cuánto se le quiere.

Agregó que en caso de que despierte llorando por las noches habrá que darle consuelo y no regañarlo si orina o defeca en su ropa, simplemente cambiarlo sin alterarse. Es necesario tolerar sus estados de enojo, aunque habrá que seguir marcando límites.

Indicó que previo al ingreso del menor a la estancia, él o los padres del menor son entrevistados por el área de psicología a efecto de comenzar a analizar el perfil psicológico del menor, así como del entorno familiar en el que se desenvuelve. Los tres primeros días de clases se solicita al padre de familia acompañar al niño a la estancia y convivir con él a efecto de que el proceso le sea lo más favorable posible.

Además del apoyo que brinda el personal médico, de trabajo social, nutrición y psicología, Aguilera García reconoció el papel primordial que desarrollan las maestras de las estancias infantiles pues son ellas con quienes el menor convive la mayor parte del tiempo que permanece en la estancia.

Es un trabajo en equipo que complementa el desarrollo integral del menor, junto con la educación que recibe en el seno familiar como principal responsable de la formación de valores decisivos en el infante como la honestidad y el respeto mediante una buena comunicación concluyó.