Una tarde de gratos recuerdos beisboleros con Manuel, Jorge Parra, Raúl Palacios y Ray Betancourt

27 / Agosto / 2013

Por José María Castañeda

SANTIAGO.- Las anécdotas beisboleras, las cosas chuscas que vivieron siendo peloteros activos hicieron las delicias de aquella tarde; donde el platillo fuerte fueron los camarones preparados por doña Rosa en el bar El Mercadito, de Rodolfo Martínez Peña, rociados con las cervezas campeonas Pacifico y Corona, además del súper campeón: la ballena bien helada, hicieron que pasáramos una tarde húmeda el pasado viernes.

Manuel Parra, Jorge y Sergio Parra, además de Raúl Palacios, y quien para el juicio del que esto escribe una de las personas que más conocen de béisbol en el municipio santiaguense: Raymundo Betancourt Ceballos, además de los cronistas deportivos Delfino Vergara, Octavio Santana, y obviamente yo pasamos ratos de grata convivencia. Sobresaliendo entre las anécdotas aquella que platico Manuel Parra, de cuando mando a dormir luego de conectarle un recto de derecha al mentón a Vicente El Huevo Romo, quien venía recién desempacado de Grandes Ligas luego de una diferencias personales. Comentaba El Caballo Parra que El Huevo Romo, luego de haberse tomado media botella de whisky, le reclamaba a Manuel el que hubiera golpeado a uno de sus amigos, yo estaba molesto y le dije al Huevo, no estés chingando tú también porque a ti también te parto la madre.

Pero como Vicente Romo el hombre nacido en Santa Rosalía B.C., también era un hombre corpulento y de aproximadamente 1.90 de estatura, se levantó y le dijo conmigo te chingas, Caballo; por lo que rápidamente me levante y nada más me aguanto uno –dijo-, porque luego se puso a dormir, ¡ah! pero lo malo vino después; como ‘El Huevo’ era el caballón del equipo por venir de Grandes Ligas nos dieron de baja del equipo.

También narró aquel famoso pleito que Manuel sostuvo con el licenciado Cerón, en el Casino de la Feria y que muchos recuerdan, porque hasta bardas tumbaron debido al tonelaje de ambos, y que Manuel le ganó al entonces más terrible porro que haya tenido la Universidad.

Por su parte Raúl Palacios, tampoco se quedó atrás platicando cuando agarraban de su puerquito al ‘Zurdo’ Llanes, al que en una ocasión cuando iban a jugar a Puerto Vallarta, de aquella vieja Liga del Noroeste, al ver la maleta de Llanes sola, Manuel le echó una piedra de gran tamaño, provocando que al Zurdo- nacido en el poblado del Turco- casi se herniara al cargar su maleta.

Pero El Zurdo tampoco se quedó atrás, ya que en una ocasión al estar practicando al ver que Manuel se cambiaba de ropa, agarró un sapo vivo y lo echó a la maleta de Manuel, sacándole tremendo susto a la esposa de éste; ya que cuando sacaba las camisolas sudadas de la maleta de Manuel, el sapo brincó saliendo de la maleta. Cosa que casi le provocaba un infarto a la mujer de Manuel, quien al reclamarle al ‘Zurdo’ su proceder, éste les dijo aguanten cabrones, ¿qué nada más ustedes quieren hacer bromas? Estas, y muchas anécdotas se platicaron esa tarde húmeda, del pasado viernes.