Presunto homicida de restaurantero de Tecuala omite declaración

24 / Septiembre / 2013

Por Oscar Verdín Camacho

José Inés Partida Martínez ha preferido callar sobre su presunta participación en el homicidio de Fernando Cataño Sandoval, su ex jefe, dueño del restaurante La Costa y quien fue ejecutado el uno de enero pasado en el municipio de Tecuala.

De 21 años de edad, que cumplió en julio pasado, José Inés es 21 años más joven que María Isabel Cervantes González, señalada como su amante y ahora viuda de Cataño.

Reciente su aprehensión en la ciudad de Tijuana, Baja California, al ser puesto a disposición del Juzgado Tercero Penal en Tepic, José Inés se negó a emitir declaración preparatoria en torno a la citada muerte. Era el administrador del restaurante y ya le fue dictado auto de formal prisión.

Nacido en Atotonilco, municipio de Tecuala, nada ha dicho sobre la versión de la misma María Isabel, consignada en enero por encubrimiento y quien lo señaló como el autor intelectual del asesinato.
Según la mujer, el uno de enero por la noche cuando ya habían cerrado el restaurante, repentinamente fue apagada la luz y cuando regresó la visibilidad pudo ver a dos encapuchados, portando armas de fuego, que sometieron a su marido y se lo llevaron. Luego intentó avisar a la policía pero José Inés se lo impidió: le dijo que los había contratado para matarlo. Dedujo que él apagó la luz.

Horas más tarde el cuerpo de Cataño Sandoval fue hallado junto a su camioneta, calcinados ambos.

Un día después –según la declaración de María Isabel-, José Inés fue a despedirse de ella, a su casa. Le pidió perdón por lo que había hecho y recibió mil pesos para que se ayudara en el camino. Le dijo que se iría a Tijuana, ciudad donde fue detenido hace unos días.

De acuerdo con la Fiscalía General del Estado que la semana pasada citó el asunto, el muchacho huyó más que nada porque lo amenazaron los sujetos que ejecutaron a Cataño, a quienes ofreció 60 mil pesos y sólo pudo entregarles 10 mil. Uno de ellos sería apodado El Cundina.

La presunta vinculación de José Inés se conoció poco después, ya que María Isabel fue detenida en un retén del Ejército Mexicano, en el estado de Sinaloa, a pesar de que había una orden de un agente del Ministerio Público para que no saliera de Tecuala mientras continuaba la investigación. Justificó entonces que sólo pensaba ir a Tijuana a acompañar a sus hijos, que radican en Estados Unidos y vinieron al sepelio, y que después regresaría.

María Isabel asegura que ella no planeó el homicidio, aunque sí escuchó, el 29 de diciembre del 2012, decir a José Inés que mataría a Fernando, pero no le creyó.

El muchacho estaba molesto porque un día antes, durante un baile en Tecuala amenizado por la banda MS, Fernando llamó a policías municipales para que lo retiraran puesto que no dejaba de molestarlos.

Un agente municipal declaró que, efectivamente, el joven estaba ebrio y quería llevarse a María Isabel.

En enero reciente se cuestionó si había sido suficiente la consignación de María Isabel por encubrimiento de homicidio o si también tuvo relación con el plan.
El único que lo sabría es precisamente José Inés Partida Martínez.
Pero el joven amante guarda silencio