Editorial

25 / Febrero / 2014

Ante la construcción del Canal Bicentenario, los tres municipios, Bahía de Banderas, Tepic y Santiago, se convierten automáticamente en bastión político para el Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Sin embargo, los operadores políticos brillan por su ausencia, pareciera, que discretamente están dejando avanzar a la oposición que cada día se organiza e, indiscutiblemente, toma mayor fuerza, ante el desgobierno de Rafael Cervantes Padilla.

Poco a poco, se van prendiendo los focos rojos por el crecimiento de personajes como Genaro Parra y Adrián Guerra, quienes todos los días trabajan, mientras que en el PRI, poco a poco se va percibiendo una desbandada ante la posibilidad de la imposición de sus candidatos.

Los expertos aseguran que en Bahía de Banderas el PRI no puede perder. Sin embargo, recientemente, en el 2011 ya sucedió, fue de esta manera como se dio la transición política, con el candidato del PAN Rafael Cervantes, por primera vez en la historia del municipio.

La película podría repetirse y sería, Bahía de Banderas, uno de los descalabros más vergonzosos del tricolor. Veremos cómo siguen avanzando.