¡POR FIN QUÉ¡ ¿HAY O NO HAY?

* Ama de casa de Cañada del Tabaco afirma haber visto a un jaguar cazando sus gallinas y animales de engorda

21 / Marzo / 2014

Por José María Castañeda

ANTIAGO.- Arroyos de tinta se emplearon al comienzo de la administración sobre si había o no presencia de jaguares en la zona de marismas de nuestra municipalidad, afirmando entre otros el Lic. José Cruz Ávila Camacho, que al no ser esta especie endémica de la región la afirmación del felino no era más que una elucubración mental de las autoridades en turno y a una fauna de personajes que querían abultar sus carteras haciendo tours para que los turistas vieran las huellas del felino incluyendo las eses fecales del animal.

Todo lo anterior dio inicio como se señalaba al comienzo de la nota a los pocos meses de tomar posesión Pavel Jarero Velázquez, sin embargo por medio de cámaras rastreadoras instaladas en la finca la Papalota propiedad de la familia Vallarta Chan, dieron cuenta de la existencia del felino manifestando alguna vez Nacho Vallarta, que no se debería de correr la voz, porque existía el riesgo que cazadores furtivos pretendieron darle muerte al jaguar, o a los jaguares por el simple hecho de llevárselo como trofeo de caza a sus casas.

Sin embargo ayer llamo poderosamente la atención de los radioescuchas del justado noticiero que se edita por la mañana y que conduce el licenciado Jesús Narváez, la llamada de una mujer del poblado de Cañada del Tabaco, quien aseguro estar temerosa ya que ella había visto al felino a pocos metros de su domicilio al parecer pretendiendo cazar sus gallinas, u animales de engorda tales como puercos y ganado vacuno.

Nuestro municipio siempre ha sido prodigo en su fauna, y a pocos días de que falleciera el estimado Capitán Parra, este llegó a platicar en sus tertulias que en sus años mozos en la serranía de Yago habían matado un tigre y que se lo habían comido en pozole.

Otro personaje santiaguense, ya desaparecido, a quien me tocó entrevistar un par de años antes de su muerte, fue a don Florencio Román Curiel, quien me platicaba que atrás del cerro refiriéndose a la Amado Nervo, por aquellos años había tigre, había venado, había muchas especies que a la fecha son parte del recuerdo virgen de nuestra fauna, y aún que todavía quedan algunos jabalíes pegado al Cerro de Peñas, de Paredones y de Ojos de Agua, estos se van acabando luego de la caza indiscriminada de cazadores furtivos a lo que ahora se agrega la quema de caña donde mueren jabalíes que se adentran en los cañaverales a comer el tallo de la caña, así las cosas en nuestro vergel que no es otra cosa que el valle de Ixcuintla.