EL ITACATE: ¿Gobernará en el futuro próximo un robot en los Pinos?

Por Agustín Almanza Aguilar

07 / Abril / 2014

Escuchamos e incrédulamente asombrados, que el líder de Corea del Norte ordenó que todos sus súbditos (los hombres) se cortaran el cabello como él (¡!!¡) ¡Las ideas de un dictador orate! Ahora, imaginemos que nuestro amadísimo y patriota primer mandatario ordenara por decreto estructural reformatorio que todos nos peináramos como él, con el ‘copetín tallado’ (¿No que no?, diría Vargas Llosa).

En una colaboración pasada anotábamos que un tertuliano de café mañanero nos había lanzado la puntada sobre la tesis de que, cuando estuvo hospitalizado, Peña Nieto recibió un implante cerebral, un chip, con el fin de manejarlo a control remoto, y ya no la regara como lo venía haciendo, pero sucedió algo, recientemente, que pone en tela de duda esto.

Ahora el ‘gavioto’ nos salió con otra genialidad, con otra ‘Perla Japonesa’ (tan estimadas por aquél periodista incisivo que fue Nikito Nipongo). Leamos: Hace unos días el presidente se atrevió a sugerir que un robot podría tener las capacidades de llegar a los Pinos; ‘ al ver a este robot –expresó- que nos ha mostrado varias de sus capacidades, podría yo incluso sospechar que en algunos años, alguno de ellos o alguna vez se pretenda que un robot llegue a gobernar a un municipio, un estado o un país’. Peña nieto balbuceó estas palabras momentos después de conocer los talentos de ASIMO, un robot que labora en la fábrica de la empresa Honda, ubicada en Celaya, Guanajuato. Después intentaría rectificar su ocurrencia al aclarar que ‘yo creo que eso no ocurrirá, para quienes tenemos la responsabilidad social de gobernar, algo que será insustituible por la tecnología es compartir las emociones’. Pero la corrección fue parcial y el daño ya estaba hecho. Quedó perfectamente claro que para Peña la política no es sino una simple cuestión de técnica robótica que implica realizar los movimientos ‘correctos’ en las situaciones adecuadas, a aunque con una matiz ‘emocional’ agregada para engañar a los ingenuos (John M. Ackerman, La Jornada, Marzo 3, pág. 21).

Por lo pronto la plutocracia y la oligarquía judía está de plácemes con su desempeño, cumplido al pié de la letra según actas protocolarias (‘Poderoso caballero es Don Dinero’). Veamos: un rabino, Arthur Schneider, presidente de la Fundación estadounidense ‘Apelar la Conciencia’, anunció que Peña Nieto será objeto de un homenaje y reconocimiento por haber demostrado que es todo un ‘Estadista Mundial’ Por su capacidad suprema (sic) de liderazgo en México y por las difíciles decisiones que ha tomado para impulsar a su nación y al pueblo con sus reformas estructurales. ¡Felices los judíos! Y –continuó la zalamería fariséica, con la responsabilidad global comprometida con el desarrollo económico y social, la paz, la cooperación nacional e intercultural (¡?) anclándola en los derechos humanos y en la libertad y la tolerancia

Nieto se aplaudí a sí mismo y agradeció sinceramente dicho reconocimiento, sintiéndose Muy horado. El cósmico evento se verificará el 23 de septiembre, y para ellos el hambriento y superjodido pueblo mexicano está invitado de todo corazón.

No creemos, pues, que con esas reformas ‘estructurales’ del gran estadista Universal y sus ad láteres se haya cometido alguna traición a la nación, porque su religión no se lo permite. Sabido es que la familia del ‘copetes’ es ultra católica y el fue educado en los más finos y caros colegios Maristas. Así es que hay que tener fé en el señor de los Pinos, que no es un robot de ninguna potencia mundial, conste.