La Avenida México continúa siendo una trampa mortal para motociclistas

05 / Mayo / 2014

Por José María Castañeda

SANTIAGO.- La Avenida México, una de las arterias viales de mayor tráfico en la cabecera municipal, sigue siendo escenario de accidentes constantes luego que automovilistas y motociclistas agarran las rutas a velocidades más allá de lo normal provocando un alto grado de siniestrabilidad, con saldos sangrientos.

Ya en repetidas ocasiones de manera pública hemos denunciado los y hemos pedido la intervención de políticos cercanos al gobernador para que nos pongan topes o vibradores que obliguen a los conductores a aminorar la velocidad de sus unidades móviles, pero poco es el caso que nos hacen quizá en espera de que suceda una desgracia donde haya pérdidas humanas.

Funcionarios en su momento de la talla de Abel Hinojosa, entonces director de la policía vial en el municipio tabaquero; de Beni Ramírez, director de los servicios médicos de salud en el estado, todos han sido puestos del conocimiento de lo que sucede en la Avenida México en su entronque con la Avenida Amado Nervo, y todos dicen que van a actuar en consecuencia sin embargo todo se ha ido en promesas incumplidas hasta la fecha.

Hará un par de semana cuando este reportero al llegar a su domicilio se encontró con que un grupo de curiosos se encontraban alrededor de un joven que por no cederle el paso a un automovilista se impactó con su motocicleta en el guardafangos del lado derecho de la parte de atrás del automóvil y aunque la motocicleta se encontraba prácticamente destrozada el joven resultó con lesiones en el cuerpo y aunque se quejaba y permanecía en posición de cúbito no sufrió fracturas de acuerdo a la primera inspección que le realizaron paramédicos de la Cruz Roja, por lo que de nueva cuenta solicitamos, ya no a Abel Hinojosa, director de tránsito municipal con licencia, sino al nuevo titular de dicha dependencia, y de nuevo al Dr. Beni Ramírez, que recuerden la solicitud de vecinos de la Amado Nervo, en el entronque que hace la Avenida México, que les cuesta o querrán quizá que haya muertitos para entonces si interceder de a deberás, ¡carajos!.