Visión Política: Mientras otros estados mecanizaron sus campos de cultivo, en Nayarit el campesino se quedó en el atraso.

Por: Edmundo Virgen

30 / Julio / 2014

En NAYARIT tan mal está la situación económica de cientos de miles de familias que habitan en el campo y en la ciudad, que al darse a conocer el próximo arribo del senador MANUEL COTA JIMENEZ a la dirigencia nacional de la CNC, lo que lo coloca también como el más fuerte aspirante a ser el candidato tricolor al gobierno del estado para el proceso electoral del 2017, volvieron resurgir las esperanzas de aspirar a una mejor calidad de vida, de todas estas familias que viven sumidas en la miseria y en el más completo abandono por parte del grupo político gobernante que creyó que con solo ponerse un sombrero y cabalgar a caballo se resolverían los múltiples problemas económicos que tiene el campo NAYARITA.

Y aunque en el interior del estado todavía existió gente que en el pasado proceso electoral vivió atemorizada de que las autoridades les retiraran los programas federales si no votaban por tal o cual candidato, en el municipio de TEPIC esta amenaza no funcionó y el pueblo dio su voto en contra de un sistema político que no le ha favorecido en nada y en cambio a perjudicado a mucha gente. Pero al escucharse el nombre de MANUEL COTA JIMENEZ como el más viable candidato priista al gobierno del estado de NAYARIT, las esperanzas de contar con un ejecutivo amigo del pueblo volvieron a resurgir, e incluso el ex gobernador Ney posteo en su muro que -ahora si volverá a llover parejo-.

Y aunque haya algunos que critiquen al ex gobernante por la deuda que les heredó, lo cierto es que el vecino de la colonia Mololoa repartió y salpicó el presupuesto entre todos los NAYARITAS, lo que generaba dinamismo en las actividades productivas, de tal manera que los beneficios económicos se veían tanto en el comercio, como en todos los hogares del estado. Y ni que decir de los campesinos que aún se acuerdan y añoran el seguro de vida que les otorgó el ex gobernante y que les fue de mucha ayuda, pero que para su mala fortuna poco les duro el gusto, ya que al concluir el sexenio neysista les fue retirado, lo cual vino a dañar aún más la de por si deteriorada situación económica de las familias más pobres del estado.

Ahora todas estas familias siguen a la espera del arribo de un nuevo gobernante que en verdad ponga en marcha proyectos que reactiven las actividades agropecuarias como la pesca, la ganadería y la agricultura, para que NAYARIT vuelva a ser ese estado prospero, con una agricultura boyante, que durante décadas inundaba con miles de toneladas de productos agropecuarios la Central de Abastos de Guadalajara Jalisco, así como de importantes centros de consumo en diferentes estados del país, donde los productos del campo NAYARITA, así como los productos del mar, eran ampliamente codiciados por los consumidores por su gran calidad.

Definitivamente eran tiempos de bonanza que lamentablemente en NAYARIT han desaparecido desde hace rato, principalmente por las equivocadas políticas de impulso al sector primario, el cual se ha quedado rezagado en comparación con otros estados del país que hoy en día son grandes productores agrícolas. Los productores de Sinaloa, Sonora, Jalisco, Zacatecas, Guanajuato y Michoacán, tienen décadas introduciendo nuevas tecnologías en la producción de cultivos, mientras que el campesino NAYARITA sigue sembrando como lo hicieron nuestros abuelos y en consecuencia, ha sido desplazado por los grandes productores de otros estados del país, por lo que ya urge un proceso de reconversión e industrialización de los productos agrícolas, aunado a una disminución en la importación de productos del campo para que al campesino le vaya mejor en la comercialización de sus cosechas.