Se dice chamaqueado diputado Manuel Carbonell

*Quién duerme con niños, amanece miado, así le pasó a Carbonell, puso a una priísta como diputada, pues tendría una diputada del PRI, ahora de que se queja, si ya sabía que era priísta, para que la invitó y todo por andar pensando en su lindo Veracruz o pensando como tener el mayor número de actas de nacimiento suyas

22 / Agosto / 2014

Por: MARIO LUNA

El diputado de Movimiento Ciudadano, Manuel Bernardo Carbonell Ortega, de manera llorosa y triste, se dice autochamaqueado, esto porque quien sería su compañera de partido Olga Serrano, lo abandonó para regresar a su partido del que nunca dejó que es el PRI.

Ahora lo que pretende a través de un recurso jurídico interpuesto de manera directa ante la Sala Regional del Tribunal Electoral de la Federación, con sede en Guadalajara, Jalisco, es que le quiten la diputación y se la den a otro que haga todo lo que él les diga.

Al cuestionarlo sobre el porqué le dieron a ella la candidatura y aún ponerla en la lista de pluris, a sabiendas de que era priista, Manuel Carbonell, juró que lo desconocía totalmente, por lo que se siente ahora engañado y ultrajado en lo más profundo de su ser.

Dijo que tiene confianza en que en menos de un mes se tenga un resolutivo por parte de la autoridad electoral federal, el cual el fallo, estima que será a su favor.
Ante esta situación ridícula para la dirigencia de Movimiento Ciudadano y para el mismo Carbonell Ortega, es que ellos se autochamaquearon, al elegir primero como candidata a diputada a una priista y luego se volvieron a autochamaquear cuando con pleno conocimiento de que Olga Serrano, era priísta, la volvieron a registrar en la lista de diputados plurinominales y esto porque nunca pensaron que tendrían dos espacios y que uno de ellos sería para ella.

Y es que al decir del propio legislador de Movimiento Ciudadano, es que para ellos lo relacionado a la equidad de género no les interesa, ya que la segunda posición se la deben dar a quién sacó mayor cantidad de votos, sea del género que sea, y aunque esta condición no puede estar por encima de la voluntad popular.