Imparable la ola de robos a las escuelas de la cabecera municipal y zonas urbanas

29 / Octubre / 2014

Por José María Castañeda

Santiago Ixcuintla, Nay.- La delincuencia en Santiago se encuentra a la alza, luego que se reportara el robo por parte de una empleada de gobierno en la escuela Juan Escutia, misma que se encuentra enclavada en céntrica zona de la ciudad.

Flor López, por medio de las redes sociales, denunció lo anterior públicamente señalando que era una lástima que los amantes de lo ajeno esté tomando como objetivo para robar las escuelas, no nada más de la cabecera municipal sino también de las zonas rurales, como fue el caso de la escuela Estado de Tamaulipas del poblado de Puerta Azul, misma que fue saqueada y aunque se logró la detención del malhechor éste fue puesto en libertad al otorgar el director de la escuela el perdón tras de haber recuperado lo robado.

Ayer mismo tras la denuncia de Flor López, muchos fueron los que se le fueron encima al Director de Seguridad Pública, José María N. Rodríguez, señalando que por ser doctor de profesión no reunía los requisitos para ser Secretario de Seguridad Pública. Sin embargo aquí debo de abonar a su cuenta que el Doctor Chema, (como se le llama a todos los que tenemos la suerte de llamarnos José María) que este cuenta con un auxiliar que si es policía de carrera, como lo es sin duda el Comandante Del Bosque, y que al conocer por haber asistido a cursos como opera la delincuencia debe de poner en práctica las enseñanzas adquiridas.
Yo recuerdo al entonces Director de Seguridad Pública, Martín Sedano (en el periodo administrativo de Sergio González García), quien al arribo de aquellas caravanas de personas dedicadas a la delincuencia organizada daba órdenes de a la Policía Municipal de que todo el personal se acuartelara en el edificio de la DSPM. Y la pregunta que varías veces le hice fue en el sentido de que porqué no actuaba la policía, y decía textualmente no podemos arriesgar la vida de los policías en enfrentamientos con el crimen organizado, por lo que era la ciudadanía quien sin armas para enfrentar a los delincuentes pagaba las consecuencias.

Aquí pasa una situación similar aunque no con las mismas dimensiones, la Policía Municipal por sus blandengues, o quizá para evitar la fatiga, deja a quienes hacen del negocio del robo su principal actividad; hasta que no se decida a poner orden el Comandante Del Bosque, ya que es éste el estratega de la Secretaría de Seguridad Pública.