Visión Política: Lluvias no dañaron cultivos porque el campesino no ha sembrado por falta de dinero.

Por: Edmundo Virgen

18 / Noviembre / 2014

Con la novedad estimados lectores que las pasadas lluvias atípicas que se presentaron la semana pasada esta vez no causaron cuantiosos daños a los cultivos agrícolas, a pesar de que ríos que en temporadas de lluvias son muy caudalosos como el Acaponeta y el San Pedro, que en algunos tramos se desbordaron, inclusive este ultimo interrumpió la circulación vehicular por varios días en el tramo Peñas-Tuxpan, a la altura del crucero de Coamiles, lo que quiere decir que las precipitaciones de agua de lluvia fueron muy abundantes.

Pero sucede que en esta ocasión los campesinos del norte del estado no resultaron afectados por las copiosas lluvias, debido a que miles de hectáreas actualmente permanecen sin sembrar en el campo NAYARITA, algo que hace décadas no se presentaba en NAYARIT, pero la explicación es muy sencilla, ya que esto se debe a que el campesinado no tiene dinero para sembrar, todos se hallan en total banca rota, esa es la razón por la que no se presentaron perdidas en la agricultura, porque de lo contrario, de no haber sido así, a esta hora ya andarían cientos de ejidatarios manifestándose públicamente para exigir al gobierno la entrega de los recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales –FONDEN-. Claro, hay que precisar que grandes extensiones de tierra propiedad de latifundistas si están sembradas, pero estos señores viven en la opulencia y no tienen ningún problema para cultivar sus hectáreas, y en caso de que algún fenómeno natural les dañara sus cultivos, vuelven a sembrar sin ninguna dificultad, ya que cuentan con recursos y maquinaria agrícola para hacerlo.

Y no es solo eso, ya que aparte de que disponen de recursos propios para sembrar, son los más beneficiados por la afamada Financiera Rural, institución que sin ninguna dificultad les presta dinero a los productores acaudalados. Pero al campesino que en cada temporada se ve en la necesidad de empeñar hasta la camiseta para poder sembrar, no le sueltan dinero y si lo llegan a hacer será en muy contadas excepciones y con una cascada de requisitos. Esta es la razón por la que en esta temporada serán miles de hectáreas las que permanecerán ociosas, y si a esto le agregamos que los precios de garantía de los productos del campo están por los suelos, la situación se pone peor debido a que el agricultor a la hora de comercializar su cosecha, no recupera ni la inversión, esto lo pudimos apreciar con los productores de frijol en la recién finalizada temporada, ya que llegaron a vender el grano hasta en $6.00 el kilo, precios verdaderamente de burla, cuando en el mercado llegaban a estar los precios muy elevados.

Por cierto que los campesinos de NAYARIT siguen a la espera de que el gobierno federal les entregue los dos pesos por kilo de frijol entregado en los centros de acopio, que les prometió les otorgaría la federación a través de la Sagarpa como un estimulo, pero que hasta la fecha no han visto nada y hay quienes afirman que este dinero todavía lo andan jineteando esos grupos de políticos que en complicidad con los Coyotes en cada temporada de cosecha obtienen millonarias ganancias a costa del hambre y sudor del campesino. En cambio en el estado de SINALOA hace varios meses que a los productores de frijol se les entrego esta bonificación de $2.00 pesos por kilo del grano entregado, lo que significa que los representantes campesinos de NAYARIT son más bandidos que los de SINALOA, por eso el campo NAYARITA sigue tronado, al contar con representantes campesinos que solo se interesan por sus intereses particulares aunque el campesinado se muera de hambre. Y lo mismo sucede con los pescadores, que cuentan con legisladores que nada más en periodos electorales se interesan en sacarlos de la pobreza, pero nada más llegan al congreso y se olvidan de ellos, ni modo eso solo pasa en NAYARIT, estado donde el progreso no se ve por ningún lado y la pobreza extrema avanza como epidemia.