REDESCUBRIENDO: La Personalidad Obsesivo-Compulsiva

Por: José Miguel Cuevas Delgadillo

07 / Mayo / 2015

Quienes sufren el trastorno de la personalidad obsesivo-compulsiva son personas formales, fiables, ordenadas y metódicas; pero a menudo no pueden adaptarse a alguna circunstancia o cambios que pueda haber en su vida o en la relación con los demás. Pueden ser excelentes en sus responsabilidades hasta llegar a lo exagerado, sin embargo, son personas que sufren muchísimo, que frecuentemente traen ansiedad en su mente por el mismo pensamiento obsesivo que tienen y que por lo mismo se les dificulta muchísimo tomar decisiones, y en ocasiones decisiones muy sencillas.

Piensan demasiado las cosas, le dan muchas vueltas y tienden a ser muy perfeccionistas, son obsesivos y compulsivos. Lo obsesivo tiene que ver con los pensamientos y lo compulsivo tiene qué ver con las acciones. Toman sus responsabilidades con tanta seriedad que no toleran los errores; este es el punto más importante, en esto radica su propia infelicidad, son tan obsesivos con sus responsabilidades que no toleran los errores. Sus responsabilidades les producen ansiedad y raramente encuentran satisfacción en sus logros, nunca están satisfechos con lo que han hecho, siempre ven un pero o algo mal y viven habitualmente con ansiedad; sus propias responsabilidades les provocan un estado ansioso.

Frecuentemente son grandes personalidades, en especial en las ciencias y en otros campos intelectuales, en donde el orden y la atención a los detalles son fundamentales; en ciertas áreas laborales son excelentes, pero en el trato son personas muy difíciles. Qué complicada es la vida para el obsesivo compulsivo, su vida es desgastante, gravoso y angustiante. Con regularidad, su mente es distraída, incierta y dudan de sus propios juicios y razonamientos. Si el trastorno obsesivo-compulsivo se combina con una baja auto-estima, el asunto se complica mucho más.

Es muy importante es que sepamos reconocer este tipo de problemas para poder ayudar a quienes los padecen, porque lo que están reflejando es la intensa inquietud que hay en sus corazones, los conflictos que traen en sus mentes, los problemas no resueltos, etc. Si bien es cierto que complican las vidas de los demás, ellos mismos sufren bastante. ¿Es complicado? Sí, es complicado. ¿Es difícil? Sí, por supuesto que lo es, pero hay soluciones y opciones de tratamiento para buscar ayuda para ellos. ¿Quién debe diagnosticar? Un profesional de la salud: psiquiatra, psicoterapeuta, psicólogo, medico. El tratamiento regularmente es alopático, existen otras alternativas medicinales, sin embargo, la ingesta de medicamento alternativo debe ser utilizada con mucha prudencia. Aunado a lo anterior, la psicoterapia individual es un refuerzo para el medicamento. Es altamente recomendable para complementar el tratamiento la participación activa en un grupo de auto-ayuda serio, responsable y profesional. El grupo debe ser reconocido por su trabajo profesional, debemos ser muy cuidadosos de elegir el adecuado. Hasta la próxima. Terapeuta Familiar y Conferencista. Consultas Celular 311 136 89 86.