Nayarit Plural: ¡A NADIE IMPORTO TRIUNFO DEL ABSTENCIONISMO!

Por Fernando Gutiérrez Meza

17 / Junio / 2015

La fiesta y algarabía aún persiste luego del resultado electoral del pasado 7 de junio, en que el triunfador fueron millones de mexicanos que optaron por quedarse en su casa y no validar una democracia simulada y a medias, pues el país es gobernado por gente que no obtiene el cincuenta más uno que debiera ser, sino un reducido grupúsculo y organizaciones que todavía logran triunfos o en su defecto alianzas temporales que una vez en el poder se desintegran.

Los representantes populares electos debieran sentir vergüenza, pues hubo entidades como en el caso de Nayarit, donde en cada proceso disminuye el número de votantes, comparado con el padrón que existe o la cifra de familias que viven en nuestro territorio, eso hablando de la capital nayarita en que se concentra el grueso de la población y luego de siguen Bahía de Banderas.

Sin embargo, eso poco le importa a los senadores, diputados locales o federales en el caso de los electos el pasado 7 del mes en curso, que son de la idea que en una competencia con un sufragio de diferencia de pierde o se gana, pero no debiera ser así, la obligación de las instituciones electorales es trabajar por convencer a los ciudadanos que cumplan con ese deber cívico, mientras que los partidos ofrecer verdaderas y viables ofertas políticas que llamen la atención del pueblo.

Pese que el proceso culmino ya y los dirigentes nacionales de partidos como el de Peña Nieto, continúan con el festejo y hablando de unidad y triunfo, parece que se aceitan la maquinaria y los motores rumbo a la siguiente elección, caso Nayarit, en que el 2017 se renovara el Gobierno, el Congreso y los 20 Ayuntamientos de la entidad.

Los grupos internos y externos del PRI ya manejan sus gallos y gallinas, ejemplo se tiene a Edgar Veytia, al que buscan meterlo al baile, otro que suena es Raúl Mejía González, los senadores Margarita Flores Sánchez y Manuel Humberto Cota Jiménez, en tanto que del otro lado andan Hilario Domínguez Villanueva, el conocido Layin, personaje del que la semana anterior se supo que al parecer uno de sus tráiler transporta en que envía mango, llevaba mariguana, eso en un Estado del Extranjero.

Entre los prospectos a la silla que dejara el 17 Roberto Sandoval Castañeda, se menciona también el nombre de Antonio Echevarría Domínguez, joven menos quemado que más de alguno y que pudiera dar la sorpresa, al menos es poco lo que se sabe comparado con los citados en el párrafo anterior.

El citado muchacho, tiene capacidad económica para comprar a los dirigentes políticos y formar una alianza de partidos, sumado a la experiencia de sus padres en esos trotes de la política, razón por la cual, no es sorprendente que de un momento a otro se le observe recorriendo más de cerca los municipios y sus poblaciones.

Inclusive, el Junior de la familia Echevarría podría buscar convertirse en el segundo candidato independiente con garantía de triunfo, luego del resultado en Nuevo León, en que una persona ajena a los partidos y las mafias del poder logra acceder al gobierno, con el respaldo de miles de ciudadanos que confiaron en su proyecto político que lo llevo al triunfo.

Cambiando de tema, pero relacionado con candidatos, el próximo año se tendrán elecciones para rector de la Universidad Autónoma de Nayarit, y en estos momentos suenan los nombres de los profesionistas en derecho Alfonso Nambo Caldera y Juan Antonio Echegaray Becerra, ambos son garantes de seriedad y capacidad, aunado al trabajo que siempre han mostrado en las actividades que realizan.

Se habla de otros prospectos que aspiran a suceder a Juan López Salazar, pero carecen de seriedad, profesionalismo y simpatía entre los sectores universitarios, y se les vienen sumando porros universitarios y aviadores que en poco han contribuido para el desarrollo de la máxima casa de estudios, pues a esa gente la consideran escoria dentro del tempo del saber y el conocimiento, pero solamente ellos no lo ven así y a toda costa buscan mantenerse y seguir cobrando por hacerle al tío lolo.

En las determinaciones universitarias se estila que las ternas pasan por el gobernante en turno, como sucediera cuando Rigoberto Ochoa Zaragoza o Ney González, que designaron en su momento a Villaseñor Anguiano, luego a Alberto Rivera Domínguez y así sucesivamente, por lo que veremos cómo se dan las cosas el año entrante y que tipo de porro o gente seria llega a la rectoría.