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Con visión ciudadana: ¿Por fin una reforma educativa efectiva?
Enrique Vázquez Coronel
03 / Julio / 2015
La aprehensión de la entonces líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la educación, Elba Esther Gordillo y la promulgación de la Reforma Educativa fueron dos campanazos contundentes que dio el presidente Enrique Peña Nieto al iniciar su administración, ganando popularidad y la percepción de que estábamos ante un buen gobierno, la sola detención de la líder sindical repudiada por toda la población por la evidente corrupción con la que manejaba el sindicato, ponían un tono de cambio y esperanza en el Sexenio del Presidente Peña, sin embargo después de un arranque que sorprendió a la mayoría, Pacto por México, Reformas, Inversiones, todo perfilaba a que era cuestión de tiempo para que nuestro país despegara por fin en crecimiento económico y desarrollo.
Los meses pasaron, el ritmo bajó y las reformas sencillamente no se están materializando como deberían, la Reforma Fiscal que generó malestar entre la gente por el alza en los impuestos aún no logra generar un aumento sustancial en la capacidad de recaudación del estado y si bien se han logrado avances en la formalización de más y más comerciantes, aún estamos lejos de los niveles ideales. La reforma educativa por su parte, encontró una férrea lucha por parte del gremio docente, que a través de sus ramas más radicales ha puesto de cabeza el Distrito Federal en múltiples ocasiones, así como a los estados de Guerrero y Oaxaca donde las marchas, los disturbios y las afectaciones patrimoniales son prácticamente el pan de cada día, cientos de Maestros se movilizan sin descanso dejando sin clases a miles de jóvenes sin castigo alguno, cobrando eso si su salario integro, que según la organización Mexicanos Primero en el caso de los líderes sindicales asciende a más de 83 mil pesos mensuales.
Afortunadamente, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, cerró por fin la batalla judicial que sostenían los maestros contra la reforma educativa y declaró perfectamente constitucional una de las disposiciones clave de la reforma, aquella que versa sobre la capacidad del estado para dar de baja del servicio a aquellos profesores que acumulen más de tres faltas injustificadas, sean o no consecutivas, en el transcurso de un mes, lo que en teoría significaría la eliminación o por lo menos la reducción de los plantones, cierres de autopistas y marchas de destrucción de los maestros del CNTE en el país.
Este avance por si sólo debería dar un nuevo aire de vitalidad a la reforma y limitar de una vez por todas la incongruente oposición de los líderes sindicales que no quieren perder sus beneficios como dueños y señores de los sindicatos, ya viene siendo tiempo de que el gobierno federal ponga orden en la situación y deje de permitir atropellos a la ciudadanía por grupos reducidos que buscan su beneficio personal aún a costa de manchar la noble labor docente que miles de maestros realizan, capacitándose y esforzándose por sacar adelante sus grupos y sus tareas.
Así las cosas, la Reforma Educativa parece tendrá un segundo aire, sin embargo el sistema de evaluación aún continúa incierto, los resultados de los censos escolares son también difusos en el mejor de los casos y el camino por andar aún es realmente extenso, comprendo el argumento que en un país de primer mundo tomó cerca de 20 años cambiar el sistema pero si no podemos asentar ni siquiera las bases no veo como nos pueda tomar en México menos de 50 años hacer lo propio.