NUMINOR: LICENCIADA EN NEUROLINGÜÍSTICA ANA DAFNE: PROMESA DE ALTURA

Por Agustín Almanza Aguilar

08 / Julio / 2015

Grata y satisfactoria sorpresa me dio el domingo pasado mi guapa sobrina Ana Dafne Almanza Zambrano, al dedicarme un volumen de su tesis Para Obtener el Grado de Materia de Programación Neurolingüística (PNL), con el tema ‘Comunicación Metafísica con PNL, Para Mejorar la Adaptación Infantil en el Contexto Escolar. Un Estudio del Caso’. Ello en el instituto de Estudios Superiores ‘Transformación’, y con la asesoría del Maestro Rubén Armendáriz Ramírez y la Maestra María del Carmen Covarrubias, en las disciplinas Técnica y Metodológica, respectivamente. La directora del Instituto citado, Maestra cristina Sánchez Miramontes, dio consenso de liberación de la tesis.

En su dedicatoria y agradecimientos, la licenciada Almanza Zambrano, manifiesta: Me siento afortunada de estar rodeada en esta vida de grandes personas a las que quiero, admiro y de las cuales día con día aprendo algo valioso. Agradezco infinitamente el coincidir con cada una de ellas y dedico este trabajo de investigación a: Mi Bella Familia, pues han sido en mi vida como un océano, con su inmensa diversidad para aprender de cada uno. Grandes experiencias y aprendizajes hemos vivido juntos, algunas como brisa del mar y otras como una atormenta en altamar, pero lo valioso es que todas han sido tan poderosas como las olas A los Niños, que con las estrellas en sus ojos, el sol en su sonrisa y la luna en su corazón, me han enseñado un paisaje lleno de fantasía, ilusión y esperanza para un mundo mejor.

Poética, sin duda; vivencias pletóricas de luz interna: congruencia de sueños y realidad. Vida intensa y vislumbres de conciencia cósmica. Conmovedor lo que expresa sobre sus maestros, Mary Carmen Navarro, Cristina Sánchez, Gabriel Macías, Rubén Armendáriz y María del Carmen Covarrubias: Guías en su camino, que han dejado huellas en su ser, abriendo puertas a mundos maravillosos del saber y del conocimiento; experiencias luminosas del espíritu que son como llaves del iniciáticas a universos de niveles de conciencia agradables. Elevación de la mente, que contempla placenteramente el sendero de la realización magisterial. Sí, en efecto; esas estrellas, sol, luna, arcoíris, en los corazones, ojos y sonrisas de los infantes son reales semillas de vida, en fértil tierra. El arduo caminar, lleno de esperanza, se consolida, y la vida se contempla mucho mejor y más de lo que he conocido hasta hoy –dice gratando de alegría, en esta cima, de las varias que faltan por conquistar-. Pero la lucha, el combate, apenas comienza, no se olvide.

La Metáfora En el texto leemos temas claves como ‘Comunicación Terapéutica’, y, ‘Niveles de Conciencia’, entre otros a ver, veamos: la cuestión central aquí es el factor ‘Conciencia’ del Yo Verdadero’.

Al estudiar nuestro entorno, al contemplar las operaciones maravillosas de ese gran libro que es la naturaleza, nos damos cuenta que ‘las apariencias engañan’, como que hay otra realidad detrás de la que nos ofrecen nuestros sentidos físicos. Descubrimos, atónitos y admirados de la existencia de una ‘Dualidad’ general. Nos damos cuenta de que poseemos una especie de compuesto de dos naturalezas, la una física, material, carnal, ‘exterior’, y la otra inmaterial, interior, ‘espiritual’. Así, nuestra conciencia –ese ‘darse cuenta’ de la existencia de algo, de nuestro sr –cae, al principio en una especie de confusión y se enseñorea algosa si como una oscuridad –es la entrada al ‘bosque’ de los cuentos de hadas-. Ese viaje a nuestro interior es clave para ‘ver la luz al final del túnel’; es una especie de ‘muerte’. Allí, en ese estado psíquico-mental se dá una especie de combate entre esas dos ‘naturalezas’, las cuales, al final ‘expiran’, por así decirlo. De esa ‘disolución’ brotará un nuevo ser, una nueva ‘conciencia’, más superior que la de sus progenitores. Es una trasformación fundamental de nuestro ser. Los antiguos mitos nos hablan de la lucha de un caballero (el espíritu, nuestra naturaleza mental psíquica) contra un dragón (nuestra naturaleza física carnal). Tal batalla tiene por objeto liberar a una virgen esclavizada, por lo general mostrada como encadenada a una ‘gran piedra’. Otro símbolo básico: lo puro y espiritual atado a lo material y a lo bruto.

El texto de la tesis de la licenciada Ana Dafne señala: Todas estas culturas y tradiciones aprovecharon las cualidades de la comunicación metafísica para enviar mensajes que incitaban a la reflexión Subrayando que esas ‘cualidades arquetípicas’ daban, de manera sencilla, elevados niveles de conocimiento.

Las metáforas –continúa la tesis- llevan consigo un mensaje profundo y sanador esos cuentos no se han hecho para dormir a los niños, sino para despertar a los hombres a la conciencia de sí mismos. Sigue, pues, vigente aquella paradigmática frase del templo de Delfos: ‘Conócete a ti mismos’.

Te felicito sobrina y pongo mucho mi fé en ti. Te manda saludos también tu tío Germán, que colaboró en esta edición.

Recuerda esa frase del emperador Julio César, frase que conlleva la férrea y valiosa voluntad de cruzar valientemente los escollos y dificultades de la Gran Obra Transmutadora: ‘Alea Jacta Est’ –‘La Suerte Está Echada’-. El Río Rubicón te espera.