CON PRECAUCIÓN: Para bien y para mal

Por Sergio Mejía Cano

14 / Octubre / 2015

Desde siempre se ha dicho que de todos los descubrimientos (inventos) que ha hecho el ser humano a través de su paso por el planeta, por más benéficos que sean, siempre habrá otros humanos que aprovechen esos descubrimientos para darles un toque bélico y por ende destructivos para la misma humanidad.

Aquí sí se podría generalizar diciendo que en todos los descubrimientos, el mismo humano ha encontrado su destrucción, tanto en el ramo científico como en el químico y ahora con la cibernética y desde luego la digitalización en esta era computarizada en donde destacan a nivel social y popular las famosas redes sociales a las que prácticamente tienen acceso buena parte de las poblaciones del mundo e incluso en algunos casos hasta los de escasos recursos que acuden a esos centros llamados ciber-cafés que aparecieron cuando las computadoras y el internet se convirtieron en cosa popular.

Y ahora, se ha extendido a nivel mundial el mentado ciber-acoso del que por lo regular son víctimas menores de edad de ambos sexos quienes debido a su corta edad son fácilmente manipulables por personas mayores para que hagan cosas fuera de toda norma moral frente a su aparato computador sin saber quizá, muchas de las veces que están siendo grabados con algún fin comercial y de lucro o simple y sencillamente para después ser exhibidos precisamente a través de esas mismas redes.

Aquí en Nayarit, se dice por parte de las autoridades que varios padres de familia han interpuesto denuncias porque sus vástagos han sido víctimas de cibernautas o hasta de amigos y conocidos que por alguna razón han difundido las imágenes obtenidas tal vez no mediante extorción, sino voluntariamente, que han deprimido en fea forma principalmente a sus hijas que posiblemente en un momento de locura o de desfachatez no les pareció mal desnudarse o nada más bailar en forma erótica frente a su aparato y que ahora por lo mismo, sufren las consecuencias, pero a la vez haciéndose famosas en todas partes en donde son exhibidas sin su voluntad.

Sin embargo, también esas redes sociales tienen su lado bueno que por supuesto que son más que los malos; pues es como todo, ya que se entiende que todo lo bueno tiene que tener su toque de maldad que la misma gente genera, porque no es que algo sea malo, sino que lo convierten en malo a propósito mentes criminales o simplemente mal calibradas.

Gracias a las redes sociales ahora se sabe casi de inmediato sobre acontecimientos o hechos de gran relevancia; y queda claro que sí es cierto que se ven cosas que jamás aparecerá en los medios televisivos tal y como se inscribe al inicio de alguna nota que de entrada y a la mejor para llamar la atención se encabeza con un: Esto no lo verás en la televisión; pero no nada más imágenes, sino también notas periodísticas que no pasan ciertos filtros y que son difundidas a través de dichas redes, cosa que en cierto modo ha despertado cierta conciencia en buena parte de la población y en otra parte les ha atrofiado más sus puntos de vista.

Ahora es muy común que mucha gente traiga un teléfono móvil con cámara fotográfica y de video, por lo que si le toca estar presente en donde algo está sucediendo de inmediato lo empieza a grabar; gracias a esto, ahora nos hemos dado cuenta fidedignamente de abusos de autoridad de las diversas corporaciones policíacas e inclusive de cómo son tratados quienes están grabando los que en ocasiones también son agredidos por las mismas autoridades que están siendo grabadas con el pretexto de que al grabar están cometiendo un delito. Y aunque esto no está estipulado y hasta jerarcas policíacos han informado que si quien graba no interfiere en los hechos no está cometiendo delito alguno, pero aun así, se han dado casos en que los que graban son intimidados por las autoridades presentes. Pero también las redes han servido para dar a conocer abusos de ciudadanos que se creen influyentes y que en contraparte han agredido de palabra y a veces hasta de obra a elementos policíacos. He ahí casos como el que se tituló la lady de Polanco; o casos como profesores de ambos sexos agreden a sus alumnos ya sea con golpes o insultos. Y desde luego se miran sobornos de todo tipo, pues en las redes aparecen videos que, si antes nada más era posible verlos en la televisión por filtraciones, ahora son subidos por los afectados que grabaron a un funcionario extorsionador sin que se diera cuenta. Y obviamente para saber que somos la prole, según una de las hijas del presidente Peña Neto.