Taxista preso por homicidio de maestro donaría riñón a su hijo

La razón: ya se le realizaban estudios médicos y podría resultar afirmativa la compatibilidad con su hijo Roberto Guadalupe y, por lo tanto, se creía posible que en un futuro no lejano le donara uno de los riñones.

09 / Diciembre / 2015

Por Oscar Verdín Camacho

Horas antes de que el chofer de taxi Roberto Pinedo Ortiz fuera detenido –aparentemente el lunes 23 de noviembre-, y posteriormente consignado por el asesinato del maestro de primaria Ransés Peña Barrios, se veía animado.

La razón: ya se le realizaban estudios médicos y podría resultar afirmativa la compatibilidad con su hijo Roberto Guadalupe y, por lo tanto, se creía posible que en un futuro no lejano le donara uno de los riñones.

Pero la buena nueva terminó pronto. Pinedo Ortiz no sólo ha sido llevado a prisión y enfrenta un delito que, de resultar culpable, lo mantendría encarcelado muchos años, sino que también interrumpió el protocolo en cuanto al posible trasplante.
Como es del dominio público, Pinedo supuestamente recibiría 100 mil pesos, que compartiría con dos sujetos, autores materiales del homicidio de Ransés Peña. En una declaración ministerial, posteriormente ratificada en un Juzgado Penal, indicó que el dinero lo utilizaría para apoyar a su hijo, de aproximadamente 20 años y que enfrenta una insuficiencia renal.

Pero ahora, preso, el impacto en su familia ha pegado fuerte. E igual sucede con la familia del maestro Ransés y su esposa Eva Yadira Guardado Cortés, señalada como la autora intelectual del crimen y quien aparentemente pagaría los citados 100 mil pesos, una situación que conocidos de la pareja se resisten a aceptar.

Por lo pronto, el auto de formal prisión que ya les fue dictado por el delito de homicidio calificado –igual que a Audiel Cruz Pérez, uno de los presuntos autores materiales del homicidio- enfrenta las versiones de Roberto y la de Eva Yadira, ratificadas judicialmente. Ella insiste que fue amenazada por el taxista y por miedo no lo denunció, y él, por su parte, refiere que la esposa del maestro era quien urgía a cometer el homicidio.