Numinor: EL RELATO DEL TEÓLOGO PAUL DE EITZEN

Agustín Almanza Aguilar

19 / Febrero / 2016

Me llamo Ashaverus. Nací en Jerusalén, doce años antes de Jesús. Un día en las afueras de la Ciudad Santa, vía la llegada de tres ricas caravanas: eran los Reyes Magos que buscaban al Mesías que estaba por nacer. Movido por la envidia, corrí donde mi padre y le señalé el paso de los tres príncipes, y el autor de mis días, para congraciarse con las autoridades corrió a palacio y dio la noticia a Herodes. Este último comprendió de inmediato: Un nuevo rey estaba por nacer. Temiendo, pues, ser destronado, ordenó la exterminación de todos los recién nacidos en Belén, con el fin de eliminar a su rival. En suma, la llamada ‘Masacre de los Inocentes’ ocurrió por culpa mía.

Más tarde, cuando Poncio Pilato preguntó a la multitud que hacía con Jesús, yo me uní a ella para gritar con todas mis fuerzas ‘¡Crucifícale!’. Algunas horas después me encontraba frente a mi tienda cuando pasó Jesucristo maniatado y con la corona de espinas destruyéndole la frente y el peso de la cruz sobre sus débiles hombros. Entonces me pidió permiso para sentarse un instante en mi pequeño banco, y yo se lo negué. Enseguida pude escucharle esta sencilla frase: ‘Yo no reposaré aquí, pero tú no dejarás de caminar hasta el día de mi regreso’. Con estas palabras me condenó a errar sin tregua hasta el día del Juicio Final. Empujado por una fuerza irresistible, lo seguí hasta el Gólgota. Asistí a su crucifixión, a su agonía, a su muerte. Mientras más lo veía sufrir, más me hundía en la desesperación. Cuando cayó la noche regresé a mi casa. Tomé cinco monedas y me fui sin mirar atrás para siempre.

He aquí el relato del teólogo Paul De Eitzen, quien afirmó que encontrándose con este personaje en una iglesia de Hamburgo, en el año 1542. Esto no es otra cosa que una tradición oral, la cual es posible encontrarla en todas las épocas de nuestra era, bajo diversas formas, según vimos ya en la pasada entrega, en la obra del escritor español Álvaro Cunqueiro (1911-1981). Ahora, una variante la podemos obtener en la narración de un monje inglés de Saint

Albans (siglo XIII) en ‘El Romano Errante’, por ejemplo.

Esperamos que hayan disfrutado estas historias; ya veremos que encontramos en nuestra buhardilla subterránea

GARAJE: Sí, ya sé que nuestro amigo Javier Rojo Fregoso aducirá elocuentemente que la frase encontrada en su nota del jueves 15 del presente en el diario ‘Realidades’ (‘Fraccionamiento del Vicio’), fue obra de los malditos Gnomos, los Duendes o los Elfos u Orcos. Y es que, al hablar del tugurio ‘La Picantería’, se desliza esa especie de Gazapo: Son Libros de cerveza, vinos y quien sabe que más sustancias nocivas para la salud ¡Provecho! ¡Ah, otra curiosidad mirilifíquica que nos encontramos en nuestro ‘Gente&Poder’ (Feb.12), lo es la también lapidaria expresión de un político que lanza, arroja, Anzuelos de Honestidad (!!!) Pero no hay flatulencias al respecto, pues yo en cierta ocasión-casi a diario, lo padezco, y no sé por qué. Así, al hablar de la multiplicación de los panes y los peces (en el tema del papa oía voces, Celestino V/siglo XIII), el maldito enano me puso en el texto Los Pares y Los Pesas. ¡Así ha de haber andado el muy condenado!... (¡Ojo! Manda saludos el ‘Cochito Popoy’).

REFERÉNDUM: Y NO SE OLVIDE QUE EN ‘BAZAR MÉXICO ENCUENTRA USTED LO MEJOR EN HERRAMIENTAS NUEVAS Y USADAS, Y DUPLICACIÓN DE LLAVES DESDE DIEZ PESOS. ESTÁ A SUS ÓRDENES EN AVENIDA MÉXICO, NÚMERO 451 NORTE (A UN LADO DEL PUENTE), EN LA COLONIA MOLOLOA, TEPIC, NAYARIT. ALLÍ LO ATIENDE NUESTRO AMIGO TOÑO FLORES. TELÉFONOS 216 16 07 Y (CEL.) 311 121 99 64. ¡VISÍTENOS Y SALDRÁ CONVENCIDO!