NAYARIT PLURAL: ¡EL CERESO UNA MINA DE ORO!

Por Fernando Gutiérrez Meza

01 / Abril / 2016

Los centros penitenciarios del país convertidos en una mina de oro, el negocio es redondo desde una botella de agua, refrescos, comida, licor, cigarrillos, tarjetas de teléfono o hasta enervantes, que es sabido se comercian en los penales, sin olvidar la protección, privilegios como el hotel y otras canonjías disfrutadas por los presos que tienen para comprar el amor de los directores, que utilizan a los jefes de bastoneros como gancho y manera de hacer negocios de miles de pesos que al final se reparten entre unos cuantos, porque esos dineros sucios no entran a las arcas de los gobiernos.

Me platicaba un conocido que por circunstancias de la vida fue huésped distinguido del penal, que ahí se vende de todo, desde drogas, prostitución, comida y protección a los presos, también hay existen presos de primera, segunda y tercera, siendo estos últimos los más amolados, quienes a fuerzas tienen que comer Bofe, como se le conoce a la alimentación para los presos que no cuentan con recursos, a los otros se les permite que accedan hasta caviar y vino tinto, compañías femenina y lugares especiales.

Todo gira en torno al dinero, no importa de donde provenga, sea sucio, limpio, sangrado o de cualquier origen, el valor es el mismo y sirve para comprar conciencias.

Diariamente se obtienen miles de pesos, sencillamente con la tiendita que vende desde una botella de agua hasta el más caro producto que es conseguido en las grandes negocios departamentales, pero claro, los costos son al triple, y los internos se las tienen que ingeniar sobre cómo sacar dinero en el interior, se ofrecen como ayudantes en la cocina, en la huarachería, de boleros, mandaderos de los patrones, y muy al extremo las personas con diversidad de género se venden al o la mejor postor.

Refiere mi camarada, que ahí los directores no pueden estar fuera del gran negocio, o le entran o le entran, o si son muy honestos que se duda, sencillamente renuncian al cargo, pero han sido pocos, por no decir ninguno el que haya rechazado un cargo de titularidad de un penal, porque es como sacarse la lotería sin compra cachito.

Yo conozco más de un exdirector de penal que entró con una bolsa atrás y otra adelante, y han pasado años y siguen disfrutando del dinero obtenido en como chingones de los reclusorios, unos se hicieron transportistas, otros se metieron al negocio de bienes inmuebles y hubo los que se hicieron prestamistas, pero te aclaro, con el dinero del negocio, pues con el sueldo no les alcanza para tanto.

Aunque te digo, las responsabilidades son compartidas entre dos o tres personas de los penales, en tanto que la gran tajada ser la lleva el director, las zurrapas quedan para los chalanes que esperan pacientes purgar sus condenas, ya que ahí ves desde asesinos, secuestradores, fraudeadores, asaltantes, violadores policías que anduvieron de malandros y delincuentes menores o raterillos que robaron un cilindro de gas o una bicicleta.

Inclusive, me decía mi conocido ya ahora libre como una blanca palomita, que hay directores de reclusorios que se dan el lujo de vender cara la firma que autoriza la libertad de determinado preso, pues a pesar que el preso ya cumplió con la situación jurídica y el juez o magistrado ordenó la inmediata libertad, el titular del Centro Penitenciario la hace larga con el fin de obtener una lana, pero no creas que quinientos o mil pesos, hay veces que te piden de hasta cuarenta mil, dependiendo el delito de que se trató y el sujeto procesado, la mayoría de las veces se encajan con gente de rancho y que el funcionario sabe no la harán de tos, y como están desesperados caen en la ambición y voracidad de esos corruptos funcionarios.

Lo anterior deja claro que la corrupción está en todo lugar, tanto afuera como adentro de los penales, sin que autoridad alguna tome cartas en el asunto. Ni hablar, así nos tocó vivir.

Te pudiera asegurar, me expresa, que si la Secretaría de Gobernación Federa, que dirige Miguel Ángel Osorio Chong, actuará contra cualquier penal del país, casi estoy seguro que ninguno saldría limpio, en todos es la misma cochinada, yo te digo de los reclusorios del Estado, dicen que los Federales son cosa, pero ni te creas, hay tenemos al Chapo, dice.