Visión Política

Por Edmundo Virgen

21 / Junio / 2016

En el estado de Oaxaca niños que deberían estar en las escuelas portan armas para enfrentar a las fuerzas de seguridad.

Una batalla por demás desigual es la que enfrentan desde la mañana de anteayer domingo los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la CNTE y el pueblo de NOCHIXTLAN, en el estado de OAXACA, contra elementos de las fuerzas federales de seguridad tanto de la PGR, como del escuadrón de la Gendarmería, apoyados por las fuerzas estatales, todos ellos provistos de potentes armas de grueso calibre, además de portar cascos y escudos; mientras que los profesores y los pobladores de NOCHIXTLAN que se han solidarizado con el movimiento magisterial, enfrentan a las fuerzas del estado solo provistos con algunas armas con escaso parque, machetes y tal vez hasta resorteras.

Definitivamente que esta cobarde arremetida de las fuerzas del estado contra miembros de la sociedad civil ordenada por el Secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chon y por el Secretario de Educación Aurelio Nuño Mayer, no tiene por demás ninguna justificación. Pero que se puede esperar de estas analfabetas que dirigen los destinos del país, cuando para empezar, jamás fueron a la universidad y si alguna vez llegaron a asistir jamás entraron a clases, como sucede con muchos políticos que conozco y que se han atrevido a presentar iniciativas de ley en anteriores legislaturas.

Al ver a través de las redes esta batalla desigual, en la que ya ha habido al menos seis fallecidos y un medio centenar de heridos, donde incluso se ven niños participando y decididos a enfrentar al tú por tú a los comandos armados, recuerdo aquellas guerras sangrientas ocurridas en el Medio Oriente que nos difundían los noticieros de la pantalla chica hace algunos dos décadas, precisamente en las repúblicas de Irak, Israel, la franja de Gaza y As Sid Jordania, el Kurdistán y otras naciones del Medio Oriente. Pero lo que jamás imagine fue mirar en MEXICO, como sucede en el estado de OAXACA, a niños empuñando un arma para atacar a los que consideran sus enemigos, cuando en sus manos deberían de tener un libro de texto.

No cabe duda que a ENRIQUE PEÑA NIETO le quedó grande la silla presidencial y la prueba está en que carece de argumentos para lograr la conciliación entre los grupos inconformes y lo único que se le ocurre es arremeter con violencia contra los grupos inconformes, tal como lo hicieran en el siglo XIX y parte del siglo XX gobiernos tiranos, como el encabezado por el general Anastasio Somoza en Nicaragua, el general Francisco Franco en España, Fulgencio Batista en Cuba, el general Manuel Noriega en Panamá, Augusto Pinochet en la república de Chile y más recientemente Hugo Chávez en Venezuela, quienes solo son unos cuantos gobiernos represores del pueblo, a los que ya podemos anexar el régimen prista de Peña Nieto, a quien el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional envió un comunicado para que ponga fin a esa masacre que ocurre en OAXACA. De lo contrario amenazaron con volver a tomar las armas y esto sí que no le conviene al gobierno mexicano por que aparte de que crecería el numero de estados insurrectos, los ZAPATISTAS disponen de apoyos políticos y financieros en el extranjero, especialmente con los países europeos y al gobierno mexicano para nada le convendría la condena de mandatarios del viejo continente y la posible suspensión de las relaciones económicas con el mercado común europeo.