LAS HOJAS SUELTAS DE LA POLÍTICA: Cuando la política se convierte en un juego destructivo

Por: J. Trinidad Espinosa M.

12 / Octubre / 2016

La política en un invento del ser humano, como lo es también el Estado y el Gobierno, entes culturales creados para el beneficio y la felicidad de los individuos que viven en sociedad, que buscan protegerse y ayudarse mutuamente, en los cuales influye de manera determinante la política.

En palabras precisas, la política es un instrumento para atender conflictos y resolverlos, para crear ambientes de armonía y solidaridad y de asistencia mutua entre la población, entre gobernantes y gobernados, entre personas y grupos que piensan diferente, con la finalidad de crear consensos que les permitan dentro de la diversidad construir acuerdos básicos para la paz social y el progreso para todos.

Nada es más peligroso para la vida en común y la paz social que la existencia de líderes que nieguen la posibilidad de llegar a acuerdos con sus adversarios y sustenten su activismo político en la destrucción de lo que hacen sus contrarios cuando gobiernan. Tampoco se trata de celebrar y de estar de acuerdo en todo, pero sí de construir acuerdos mínimos que beneficien al Estado y a la Nación en su conjunto.

En estos momentos la campaña electoral para la presidencia de los Estados Unidos, es un claro ejemplo de lo que aquí decimos. Los propios analistas políticos y estrategas de los candidatos y algunos independientes coinciden en que la política electoral ha descendido a sus niveles más bajos de pobreza propositiva y de calidad moral; a la cual han convertido en una guerra de descalificaciones y de ataques personales que nada tienen que ver con los grandes temas de la Nación para superar sus problemas sociales y económicos.

México también vive momentos de envilecimiento de la política, a los estrategas de los partidos que están fuera del poder público, algunos del orden federal otros en los estados y municipios, sin importarles la estabilidad de la nación, del estado o del municipio de que se trate, su esfuerzo y activismo lo dedican a destruir que no es lo mismo que criticar lo que hacen sus adversarios en funciones de gobierno. La crítica es una herramienta que coadyuva a corregir errores y sirve para poner atención en temas que se han soslayado o que no se les ha dado la atención que requieren.

Es una estrategia política sustentada en acciones mediáticas, con el único fin de obstaculizar o en el mejor de los casos descalificar lo que se hace en el gobierno del orden que sea y del partido que sea; el objetivo perverso es sembrar en la ciudadanía y en la sociedad en general la desconfianza, el malestar y el rechazo hacia los gobernantes. Sin entender que si mañana ellos llegan a gobernar les pasara lo mismo, porque su actitud perversa habrá desacreditado a las instituciones.

*Académico de la UAN y analista político.