En el caso Xalisco, un sufrido vinculación a proceso

* Dan plazo de un mes para el cierre de investigación por ataque a una pareja en bulevar Tepic-Xalisco.
* Y Raúl, el señor que fue herido de bala sin deberla, ya fue dado de alta.

26 / Octubre / 2016

Por Oscar Verdín Camacho

El expediente 1126/2016 está para enmarcarse: ha ocurrido de todo y el aprendizaje es por parejo en el nuevo sistema de justicia penal.

A unos días de haberse iniciado, tras el intento de homicidio a una pareja en Xalisco y de resultar herido de bala un hombre sin relación con los hechos, al mediodía del lunes 24 el juez César Octavio García Torres encabezó una audiencia que versaría sobre el auto de vinculación a proceso en contra de Luis, a quien se le imputa la tentativa de homicidio calificado en agravio de Ricardo e Imelda, así como lesiones calificadas cometidas a Raúl.

Apenas tomó la palabra, la defensa particular de Luis reclamó violaciones a la Constitución porque, dijo, no se le había permitido acceder a la respectiva carpeta de investigación. Añadió que sí conoce el nuevo sistema de justicia –en evidente referencia a la indicación de otro juez que le pidió estudiar las reformas, citada en este espacio-, pero se le negaba conocer el caso concreto. Se pronunció por un tiempo de dos horas para tener copias y estudiar el asunto.

La solicitud fue aceptada por García Torres y la audiencia se reanudó poco después de las tres de la tarde. El juez advirtió al abogado que el acceso a la carpeta debió requerirlo días antes, cuando fue designado defensor.

A la sala número 3 fue llevada una pantalla en que se escuchó una parte de la grabación de la audiencia del jueves 20, en que la representación de la Fiscalía General hizo referencia a los delitos ya citados.

La grabación, explicó el juez, era para imponerse en el asunto.

A continuación, la agencia ministerial pidió la vinculación a proceso e hizo referencia a diversas pruebas, entre ellas las declaraciones de Ricardo e Imelda, así como un informe de policías municipales de Xalisco ante quienes arribaron después de haberse efectuados los disparos.

Según la versión de Ricardo, al detenerse en su vehículo por el semáforo en rojo en el bulevar Tepic-Xalisco y avenida Del Sol, escuchó el patinar de una bicicleta y por el espejo retrovisor del lado derecho descubrió a su vecino Luis, que traía una bolsa naila y de ésta sacaba una pistola. Disparó en diversas ocasiones. Ricardo aceleró, chocó contra el camellón y siguió hasta la comandancia de policía de Xalisco. Calculó que fueron como siete balazos.

Ricardo estimó unos dos años en que ha tenido problemas con su vecino.

Por su parte, su esposa Imelda acató la orden de ¡agáchate! y luego sintió que el carro pegó en algún objeto y escuchó balazos. Más adelante volteó a ver a Luis, que seguía disparando.

En el informe de policías de Xalisco se describe la versión de la pareja y de que, incluso, agentes y agraviaron regresaron al lugar de los hechos porque creían que la persona herida era Luis, pero se trataba de Raúl, una víctima sin relación con el atentado.

Otro informe, de policías Nayarit de la División Vial que detuvieron a Luis, fue desestimado por el juez porque ya no se estaba calificando la detención, considerando que el imputado fue presentado con orden de aprehensión.

También se hizo referencia al hallazgo de seis casquillos calibre 45, o al resultado positivo en la mano derecha de Luis a la prueba del rodizonato de sodio, indicio de que habría efectuado recientes disparos con arma de fuego.

Sin embargo, esta última prueba, del rodizonato, fue reclamada por la defensa, considerándola una prueba nula porque ya había sido citada el miércoles 19, cuando un juez de control resolvió la libertad de Luis, por falta de indicios, al producirse una aparente distracción de un agente ministerial al no citar otras evidencias de la carpeta de investigación.

Así, lo tocante al rodizonato es prueba nula, según aceptó el juez.

La defensa, que solicitó la libertad de su cliente, pidió también la nulidad de dictámenes periciales de lesiones y en cuanto a si existió consumo de alcohol de éste, pero le fue negado porque en la audiencia no se hizo referencia a ello. Es decir, en estos juicios sólo tiene valor lo que se habla.

LA VINCULACIÓN

Agotado el debate entre las partes, el juez dictó el auto de vinculación a proceso porque, explicó, aun y cuando algunas pruebas ministeriales fueron desechadas, hay otras que acreditan la presunta responsabilidad de Luis en los hechos, en especial la versión de Ricardo e Imelda que lo conocen porque son vecinos.

De acuerdo con César Octavio García Torres, hay indicios para acreditar el intento por privar de la vida a la pareja porque los disparos en el vehículo fueron a la altura del cuerpo y la cabeza, además de que Ricardo tuvo que huir, lo que permitió que no se consumara la posible muerte de él y su esposa.

García Torres ubicó a Luis en un nivel superior porque no corrió riesgo, aceptando la calificativa de ventaja, pero no aceptó la de la premeditación porque, explicó, no hay los suficientes datos de prueba para establecer que hubo un plan en el ataque o si, por el contrario, coincidentemente se encontraron.

Y en cuanto al delito en agravio de Raúl, cuyas heridas son de las que ponen en peligro la vida, el juez estableció un dolo eventual porque no existía una intención de lesionarlo. Raúl, fue revelado el lunes, ya fue dado de alta. Tiene más de 60 años.

Dictado el auto de vinculación a proceso por ambos delitos, la representación ministerial solicitó un mes para el cierre de la investigación o la terminación anticipada del asunto, plazo que fue aceptado por la defensa.

Luis, al igual que Raúl e Imelda, no emitieron mayor comentario cuando se les dio el uso de la palabra.

Puesto que Luis tiene el derecho a no autoincriminarse, no existe su versión sobre el por qué presuntamente disparó esa mañana.