Arrestarán a comerciante de Tepic si se acerca a mujer tránsito

* La medida cautelar en contra de Marco Antonio fue dictada por un juez, a raíz de un proceso por el probable delito de amenazas.

08 / Noviembre / 2016

Por Oscar Verdín Camacho

Un comerciante que trabaja en el centro de Tepic tiene orden judicial para no acercarse a una agente de tránsito municipal, pues de lo contrario podría ser llevado a prisión.

La singular situación de Marco Antonio fue ventilada el viernes cuatro durante una audiencia de juicio oral; horas antes había sido aprehendido como presunto responsable del delito de amenazas en agravio de Alejandra, elemento de la Policía Vial del Ayuntamiento de Tepic.

De acuerdo con la denuncia ante un agente del Ministerio Público y leída en la citada audiencia, el cinco de octubre aproximadamente a las 10:40 horas, Alejandra cumplía con su trabajo en la esquina de las calles Durango e Hidalgo y encontró un vehículo fuera del límite para ser estacionado, por lo que solicitó al dueño que lo moviera. Este no quiso. Luego pretendió retirarle una placa y levantar un folio, pero el individuo subió al vehículo y le dijo: ¡le hace falta una calentadita y se la voy a dar...te voy a matar!

La audiencia fue dirigida por el juez Rodrigo Benítez Pérez, quien cuestionó a Marco Antonio si declararía sobre los hechos, pidiéndole que consultara con su abogado particular. Le explicó que si no declaraba, era algo que no sería utilizado en su contra, pero si lo hacía, podría haber partes que posiblemente serían usadas contra él.

El comerciante quiso hablar y se le condujo a otro escritorio, separado de su abogado. Cuestionado por el juez, contestó que narraría de manera espontánea: negó los cargos, dijo que es falso la supuesta amenaza y que, en cambio, ha tenido problemas con Alejandra, quien lo ha infraccionado unas seis o siete veces.

Recordó que esa mañana de octubre se encontraba en su negocio cuando observó a Alejandra, que primeramente tuvo diferencias con trabajadores de Megacable que trabajaban en la zona. Luego lo mandó llamar por la situación de su carro, le pidió su licencia y añadió que retiraría las dos placas.

Preferí subirme al carro. Yo no la amenacé. Sólo me retiré en el carro y lo metí a un estacionamiento; después regresó.

A pregunta de una agente del Ministerio Público –aceptó responder, aunque podía haberse negado sin que se le tomara en su contra-, respondió que en una ocasión se presentó a la Secretaría de Seguridad Pública Municipal para reclamar la actitud de la agente hacia su persona.

Durante la audiencia se generó un debate respecto a la medida cautelar que debía dictarse en torno a Marco Antonio. La agencia del Ministerio Público solicitaba la prisión preventiva, es decir, que el comerciante continuara en prisión.

Por su parte, la defensa pidió una medida menos drástica, argumentando que se trata de una persona con trabajo estable y que, además, está a cargo de su hija de tres años.

El juez Rodrigo Benítez decidió ordenar la libertad de Marco Antonio, pero apercibiéndolo para que no tenga acercamiento alguno con la agente. Si incumple, podría ser arrestado y se modificaría la medida cautelar.

Benítez Pérez precisó que habrá un supervisor que verifique que se cumpla con la medida. En este aspecto, la Secretaría de Seguridad Pública deberá conocer del asunto para que Alejandra no sea asignada a la zona donde trabaja Marco Antonio, es decir, que ni uno ni otro den motivo a encontrarse.

REAPARECE PRESUNTO LADRÓN GOLPEADO

En otro asunto, el juez César Octavio García Torres dictó auto de vinculación a proceso por el delito de robo calificado en contra de Tomás, un sujeto que es señalado de introducirse a robar a una tienda de abarrotes el pasado 27 de octubre, en la colonia 3 de Julio, pero al ser sorprendido fue sometido y golpeado por varias personas.

- ¿Cómo sigues? –le preguntó el juez al iniciar la audiencia-.

- Ya un poco mejor –respondió Tomás, visible en la cara la cicatriz por las lesiones-.

En la audiencia fue documentado que el presunto ladrón fue descubierto por Manuel, el dueño de la tienda, y que mientras golpeaba al comerciante se percató un niño que dio la voz de alarma. El menor había llegado a la tienda enviado por la esposa de Manuel, que necesitaba su CURP en un evento político que se registraba en la colonia.

Así, fue una coincidencia que el menor presenciara la golpiza a Manuel, lo que generó la posterior persecución y sometimiento de Tomás.