EL IV PODER: *Televisa, nuevamente en el ojo del huracán

Por: Juan Fregoso

21 / Septiembre / 2012

La empresa Televisa que dio mucho de que hablar por su supuesta injerencia en las elecciones pasadas por haber contribuido a la llegada de Enrique Peña Nieto a la presidencia de la República, según acusó en su momento el Movimiento Progresista encabezado por Andrés Manuel López Obrador, ahora se encuentra envuelta en otro problema quizá de mayores dimensiones.

En efecto, de acuerdo a la prensa nacional la policía nicaragüense incautó el pasado mes de agosto por lo menos seis vehículos al parecer propiedad de dicho consorcio televisivo. En el operativo fueron detenidos dieciocho personas de nacionalidad mexicana; en el interior de los vehículos la policía de Nicaragua halló varios millones de dólares, los cuales iban ocultos en maletas, consignan algunos medios de circulación nacional, los cuales precisan que de los análisis efectuados por la policía de aquel país se encontraron huellas de cocaína.

Por ello, la fiscalía nacional de Nicaragua inició una minuciosa investigación en relación a estos hechos, ya que se presume que el dinero es producto de lavado por el crimen organizado. Se especula que los detenidos se ostentaron como periodistas de la televisora mexicana, sin que hasta la fecha se sepa con certeza si esto es verdad, además de que la propia Televisa se deslindó de todo vínculo con los sujetos aprehendidos. Es más, en su defensa la empresa de Emilio Azcárraga Jean interpuso una demanda ante la PGJDF por la posible falsificación de documentos como el logotipo que distingue a dicha empresa, esto evidentemente con el afán de limpiar su deteriorada imagen a raíz del papel que jugó en la fabricación del nuevo presidente de México.

Sin embargo, la prestigiada revista Proceso, así como Noticias MVS que conduce la periodista Carmen Aristegui, comprobaron en el registro vehicular del distrito federal que tres de las camionetas se encuentran registradas a nombre Televisa, S. A. de C. V., con la dirección de avenida Chapultepec número 18, en la colonia Doctores, en el la capital del país.

Los vehículos incautados son una GM Chevrolet tipo Van modelo 2010, con placas de circulación 886 XCR, número de serie 1GC2GTB1A1135600; una GM Chevrolet tipo Van 2010, con placas de circulación 165 XCC, número de serie 1GC2GTBG5A1106150, así como otra camioneta GM Chevrolet tipo Van modelo 2011 con placas de circulación 751 XXD, número de serie 16CZG9CG5B1127061.

Las investigaciones en torno al caso arrojaron como dato significativo que ninguno de los vehículos mencionados tiene reporte de robo ni infracciones (por que lo pudieran haber sido detenidas en la ciudad de México).

Empero, MVS confirma que todas las unidades son propiedad de Televisa, como así lo reveló Noticias MVS que asegura tener documentos oficiales del Padrón Vehicular del DF para probar que las otras tres camionetas confiscadas por la policía nacional de Nicaragua también están registradas a nombre de Televisa S. A. de C. V. Estos dos otros vehículos son: una GM Chevrolet tipo Van 2010, con placas de circulación 848 XBG y otra GM Chevrolet tipo Van 2010 con placas 444XCJ, las dos están registradas con la dirección de Avenida Chapultepec número 18, colonia Doctores, en el DF. Según estos medios de comunicación el único vehículo registrado con domicilio distinto es la camioneta GM Chevrolet tipo Van 2011, con placas de circulación 411 XWY.

Si no por fuera por la seriedad de los medios de comunicación que hicieron el descubrimiento podría pensarse que los argumentos de Televisa, en el sentido de negar que las antedichas unidades no son de su propiedad, así como el deslinde de los detenidos, se creería que se trata de un error, pero las fuentes gozan de un gran prestigio no solamente en el plano nacional sino en el internacional, por lo que será muy difícil que Televisa salga bien librada de este otro sainete en el que, al parecer, dicha empresa no se limita a embotar los sentidos de los mexicanos con sus noticieros que tergiversan la realidad de las cosas, así como a la manipulación de encuestas electorales sino que sus actividades podrían extenderse al posible lavado de dinero. Pero la verdad de todo esto muy probablemente lo sabremos en los días subsecuentes, aunque no es de dudarse que don Emilio Azcárraga Jean utilice a toda a toda su batería de abogados para salir ileso de este vergonzoso asunto.