REDESCUBRIENDO: Pastores y Ministros Manipuladores

Por: José Miguel Cuevas Delgadillo

20 / Febrero / 2017

La definición más simple de lo que es un predicador no la proporciona el lingüista A.H. Strong: Precisamente su tarea consiste en reemplazar lo oscuro y lo erróneo de los conceptos de sus oyentes por lo que es claro, veraz y vívido. Pero no podrá cumplir fielmente esta labor sin conocer los hechos de la Revelación divina en su concatenación lógica, en sus relaciones como partes de un todo y un todo en partes diversas. En la oratoria del púlpito, la simple cita de textos bíblicos y los llamamientos fervorosos no son suficientes. Detrás de la declamación debe haber un sistema ordenado de pensamiento bíblico. Cierto que se debe despertar los sentimientos de los oyentes, conmover a las almas con el mensaje, pero esto sólo se logra de manera eficaz y bíblica mediante el conocimiento de la verdad. El predicador debe procurar las bases del sentimiento produciendo una convicción inteligente; debe instruir antes de conmover.

Si el objetivo de la predicación estriba en dar a conocer primero a Dios, presentar las realidades divinas y todo lo tocante a la salvación del hombre, y en segundo lugar, hacer que este Dios sea conocido, entonces deducimos que el estudio de la Teología es absolutamente necesario para realizar con éxito el trabajo del púlpito. Lo anterior es fundamental para identificar a un predicador, ministro o pastor como un representante de Dios en la tierra. Sin embargo, en la actualidad encontramos líderes, fundadores de organizaciones religiosas y auto-proclamados profetas que sin escrúpulos fomentan prácticas contrarias a los que enseñan; pero ¿por qué sus seguidores creen lo que su líder asevera cuando a todas luces es contrario a la moral y preceptos religiosos? En el portal de internet Red de Apoyo para Víctimas de Sectas (http://victimasectas.com/PersuasionCoercitiva.html) se puntualiza una de las técnicas favoritas de los líderes religiosos manipuladores: la Persuasión Coercitiva.

La persuasión coercitiva no es una práctica religiosa, es una tecnología de control. No es una creencia o ideología, es un proceso tecnológico. La Persuasión Coercitiva es un concepto central necesario para comprender las dinámicas sectarias. Es semejante en muchos aspectos al concepto legal de influencia indebida. En el ámbito psicológico se le conoce con diversos nombres: Reforma de Pensamiento, Lavado de Cerebro, Programación de Conducta, etc. Es un sistema coordinado de control coactivo, graduado e imperceptible, que por medio de creencias fundamentadas en el engaño, logra manipular e influir en los individuos un comportamiento determinado. Es una técnica de control mental más eficaz que el dolor, la tortura, las drogas, el uso de fuerza física o las amenazas, ya que puede producir cambios más profundos, como el de actitudes, en la personalidad de los sujetos expuestos a ella. Según Margaret Singer, el sistema psicológico coercitivo es un programa de modificación de conducta que utiliza el poder de la influencia psicológica en forma coercitiva para producir el aprendizaje y la adopción de una ideología o un conjunto específico de creencias, ideas, actitudes o comportamiento. La estrategia esencial que utilizan los operadores de estos programas es la de seleccionar y coordinar, en forma sistemática y gradual, diferentes tipos de influencia coercitiva, ansiedad y tácticas productoras de ‘estrés’ sobre periodos de tiempo continuo.

Por esta razón, el líder religioso tiene éxito, no sólo para imponer un nuevo sistema de creencias y sustituir valores en una persona, sino también para cometer delitos y que sus seguidores piensen que Dios está de acuerdo con dichas acciones. Así, el abuso sexual, el fraude, el suicidio colectivo, el terrorismo, entre otras prácticas se perciben como acontecimientos justificables, en muchos casos, mandatos divinos, por la simple razón de que el líder religioso así lo afirma. Cuando una persona cuestiona la acción y el líder se entera, inmediatamente entra en operación la manipulación a través de principios tomados de la Biblia, regularmente, los preceptos bíblicos son mal interpretados, lo que se busca es hacer creer un principio que no es para inhibir el sentido crítico de una persona que surge cuando las prácticas son incorrectas. El artículo citado, sigue diciendo: Estos grupos suelen atentar contra el derecho a la libertad de expresión y palabra al pretender restringir a sus ex-miembros el derecho a pedir al gobierno reparación por los agravios recibidos en contra de su honra, reputación, vida conyugal, vida familiar y por los daños psicológicos, físicos y económicos. Los daños económicos han traído igualmente consecuencias fatales. Identifique muy bien a su líder religioso. Hasta la próxima. redescubriendo@hotmail.com