Celular de mujer asesinada fue empeñado en 1000 pesos, precisa testigo

* También fueron proyectados breves videos donde aparece la víctima y el imputado en el interior del hotel Español.

19 / Junio / 2018



Por OSCAR VERDÍN CAMACHO


Este lunes continuó, ya en su segunda semana, el juicio oral por el delito de feminicidio en agravio de Oralia Guadalupe Jacobo López, y donde el probable responsable es un individuo identificado como Armando.

Si hace unos días se creía que esta semana concluiría el juicio, el pronóstico es que podría alargarse hasta la próxima, por el cúmulo de datos, el tiempo que requiere cada testigo, además del debate que a diario se presenta entre la agencia del Ministerio Público y la defensa particular, durante el interrogatorio a quienes emiten versión.

Un comerciante de la cabecera municipal de Compostela fue uno de los testigos que se presentaron este lunes: a él recurrió Armando para dejarle empeñado, a cambio de mil pesos, un celular marca Samsung que era de Oralia, cuyo cuerpo fue encontrado la mañana del 27 de junio del 2017 en un potrero de Pantanal, municipio de Xalisco, aunque se estima que la muerte por estrangulamiento habría ocurrido la madrugada del día 24.

El testigo dijo conocer al imputado como Chicho o Chucho.

Explicó que en algún momento en el celular se recibieron notificaciones respecto a una persona que era buscada y, luego, que había sido hallada muerta, por lo que tuvo miedo de meterse en problemas y contó los hechos a policías municipales de Compostela, que a su vez se comunicaron con policías estatales, a quienes entregó el aparato.

Durante la audiencia, el testigo reconoció el celular y, cuestionado por un agente ministerial, identificó en la sala a quien se lo dejó empeñado: sí, es el muchacho de la camisa roja, dijo, señalando a Armando con una mano.

El imputado, sentado en un extremo de la sala junto a su defensa, se mantuvo viendo hacia el frente, parpadeando repetidamente.

Otro testigo, presentado rato antes, fue un comandante de la Agencia Estatal de Investigación de la Fiscalía General del Estado (FGE). A él le fueron entregados, por parte del dueño del hotel Español, una libreta de registros donde aparece el nombre de Armando, la fecha y el número de habitación que ocupó en compañía de la ahora occisa, la tarde del 23 de junio del 2017.

De igual forma se proyectaron cuatro breves videos: del área de recepción del hotel y donde aparece la pareja, o bien cuando caminan por un pasillo y se introducen a un cuarto, luego cuando salen del mismo, además del momento que pasan frente a la recepción, retirándose.

A diferencia de Oralia, que inicialmente llevaba puesto un vestido verde y al salir del cuarto traía uno negro, además de una bolsa negra, a Armando siempre se le vio con short en tono crema, camiseta blanca y huaraches.

El testigo abundó que la bolsa de la víctima fue encontrada en un basurero, a la altura del kilómetro 19 de la carretera Tepic-Compostela.

Cuando el testigo fue interrogado por la defensa particular, se presentó un continuó choque con la agencia ministerial, que reclamó varias preguntas.

- ¿Nos estás diciendo la verdad? –se le cuestionó en una ocasión, lo que inmediatamente objetó la representación de la Fiscalía-.

- ¿Te consideras una persona con suerte?.

- ¡Objeción! –volvió a atajar la agente ministerial-.

Resultaba obvio que la defensa pretendía sembrar la duda respecto a que no le parecía lógico que en un dos por tres la policía hubiera ubicado el hotel Español o, como lo indicó más adelante, se localizara la bolsa negra en un basurero.

- ¿Tuviste suerte de encontrar la bolsa?.

- ¡Objeción!.

La mayoría de estas interrogantes fueron reprobadas por el Tribunal de Enjuiciamiento conformado por los jueces Guillermo Romero Ríos, Antonio Enríquez Soto y Jorge Enrique Ledezma.

Hubo un momento que la agencia ministerial pidió que la defensa no hiciera conclusiones personales, que no se dirigiera al testigo como una persona con suerte, considerando que es un agente investigador.

A todas las audiencias ha asistido un hijo de la víctima.

La proyección de los videos, en el expediente 1053/2017, se suma a otros donde se ve a la pareja en el bar El Sótano, acompañados de una amiga de Oralia, llamada Carla, la noche del mismo 23 de junio.

Armando se encontraba con Oralia la última vez que fue vista con vida, precisamente por su amiga Carla.