Formulan cargos por ejecución de comandante de Fiscalía de Nayarit

* Dictan vinculación a proceso contra una pareja probablemente relacionada con el homicidio del subjefe de grupo Juan Ávila, ocurrido en febrero.

12 / Septiembre / 2018

Por Oscar Verdín Camacho

En una evidente estrategia jurídica, la Fiscalía General del Estado (FGE) esperó cerca de siete meses para cumplimentar la orden de aprehensión en contra de una pareja como probables responsables del asesinato del comandante Juan Ávila Álvarez, subjefe de grupo de la comandancia de investigación de narcomenudeo.

Lo hizo luego de que hace dos semanas concluyó un juicio oral por delitos contra la salud de los jóvenes identificados como Tomás y Leslie, a quienes un juez sentenció a 7.9 años de prisión. En ese asunto, los detenidos están en derecho de presentar un recurso de apelación.

Para el caso del asesinato de Ávila Álvarez ocurrido el 14 de febrero en la colonia Hermosa Provincia, este lunes la jueza de control Sandra Sánchez Covarrubias dictó auto de vinculación a proceso a los citados Tomás y Leslie, como probables coautores. La resolución fue anunciada durante una audiencia de ampliación de término constitucional.

Tanto en el juicio por narcomenudeo como en el de homicidio -expediente 237/2018-, ha resultado crucial el cateo efectuado el 15 de febrero en un domicilio del fraccionamiento Aramara 2, en Tepic, y que arrojó la detención de los antes mencionados. Como puede advertirse, la Fiscalía primero llevó a juicio el asunto del narcomenudeo justificando una flagrancia, mientras que en el de homicidio obtuvo una orden de aprehensión.

En ambos casos la orden de cateo es uno de los aspectos que más ha combatido la defensa particular, alegando que fue ilegal.

Ha sido precisado que minutos después de la una de la madrugada del 15 febrero, policías estatales localizaron en el estacionamiento de Soriana Cigarrera el automóvil tipo Jetta en que viajaban los agresores del comandante, lo que condujo a dos domicilios en Tepic, uno de ellos el del fraccionamiento Aramara. El cateo arrojó el hallazgo de una pistola en la caja de una taza de baño.

Durante la audiencia de este lunes, se precisó que dentro del Jetta fue encontrado un casquillo de arma de fuego.

Un policía que atestiguó los hechos dijo que el conductor le disparó al comandante pero sin bajar del Jetta.

El auto de vinculación fue dictado en contra de Tomás y Leslie como probables coautores; de momento no se ha ahondado si la joven habría conocido el plan del homicidio.

De igual forma no ha sido precisado si el día de los hechos Tomás continuaba siendo elemento activo del Ejército Mexicano o si ya había causado baja.

Cada cual defendiendo sus argumentos, la agencia ministerial y la defensa particular intercambiaron roces verbales.

La defensa reclamó a la jueza que hubiera sido ella quien autorizó la orden de cateo, posteriormente giró la orden de aprehensión y ahora conociera el asunto, lo cual, insistió, contaminaba la audiencia y sus clientes debían ser puestos en libertad.

Previamente, el abogado había solicitado que la ampliación del término fuera cambiada para el martes, citando que apenas el sábado tuvo acceso al expediente; la jueza Sánchez Covarrubias difirió la audiencia dos horas, explicando que tenía otros expedientes por desahogar y que, en el caso particular, prolongarlo un día más pondría en riesgo el término fatal para la resolución.

Sandra Sánchez negó que el asunto esté viciado por ser de su conocimiento, precisando que ello ocurriría en caso de que se llegara a un juicio oral y ella formara parte del tribunal. No estamos en juicio y no estoy impedida, aclaró.

De igual forma, reprobó los comentarios del defensor, ejemplificando que tan sólo el sábado y domingo ella estuvo trabajando de guardia y no fue presentada alguna solicitud de trámite o que necesitara el apoyo judicial.

El auto de vinculación a proceso por homicidio fue dictado con las calificativas de alevosía y premeditación. Sánchez Covarrubias insistió que Tomás y Leslie son probables responsables del delito, más todavía no hay certeza de que ellos lo cometieron.

Familiares de los imputados y de la víctima asistieron a la audiencia, siempre vigilada por tres policías estatales.

La jueza autorizó un plazo de tres meses para la investigación complementaria.