De gandallas califican Villa Hidalguenses a quienes buscan el municipio número XX1

03 / Octubre / 2018

Por José María Castañeda

Santiago Ixcuintla.- Todo hace indicar que de nueva cuenta el proyecto de crear el municipio número XX1, tiende a fracasar de nuevo, luego que en esta nueva revuelta misma que encabeza el ex regidor Francisco Javier Jamit, y el regidor actual Vladimir Ocegueda; más que estar motivados por la razón, están motivados por la ambición. Y veamos el porqué de mis palabras.

Esta ocasión las personas antes mencionadas se han olvidado de invitar a este movimiento de emancipación de Villa Hidalguenses de la actual cabecera municipal Santiago Ixcuintla, a personajes de la talla del Dr. Fernando González Ibarra, de Emilio González Benítez, del propio Fernando Ornelas Salas, entre otros que en su momento abanderaron con argumentos sólidos planeados al entonces gobernador Antonio Echevarría Domínguez, quien veía con buenos ojos la segregación de Villa Hidalgo, presentaron estudios donde admitían que Villa Hidalgo tenía el potencial necesario para ser municipio, olvidándose solo de una cosa, creo que la más importante de todas, no consensuaron la opinión generalizada de los lideres naturales de los poblados por lo que en la votación final poblados como Valle Zaragoza, San Isidro el Papalote y la Presa; no quisieron independizarse de Santiago, por lo que en una votación abierta más de 4 mil pobladores de los poblados antes mencionados prefirieron continuar perteneciendo a Santiago, bajo el argumento de que para ellos les resultaba hacer sus actividades más fácil en Santiago que en Villa Hidalgo.

En este momento se repite la historia más agravada porque la nueva generación de jóvenes que desea la independencia de Villa Hidalgo con la creación del municipio número XX1, están actuando más con la ambición de ser presidente, o diputados que por el afán de servir a su pueblo. Prueba de lo anterior saltan a la vista, señalan Villa Hidalguenses; Javier Jamit, fue regidor y a media administración cambio de residencia se fue a Tepic, porque no aguantó a los pedinches que acudían a su negociación en busca de apoyos. Y del Vlady, como le llaman al actual regidor, este, dicen los habitantes del poblado allende al río, no le dá agua al gallo de la pasión, es decir no apoya a la gente mayormente vulnerable con unas monedas, cuando de todos es sabido que las decenas de miles de pesos que ganan mes a mes viene englobada con el dinero de la dieta que otorga la administración para apoyos.

Por eso se critica a Bladimir Ocegueda y a Javier Jamit, porque buscan la emancipación de Villa Hidalgo, con un solo objetivo, servirse de manera posterior de un cargo público y no servir al público. Cuando menos eso dicen los propios Villa Hidalguenses de este par de gandallas.