NAYARIT PLURAL : El Peque perdiendo ganó, ahora flamante funcionario del gobierno

Por Fernando Gutiérrez Meza

10 / Octubre / 2018

Le valieron la pena los señalamientos, descalificaciones y hasta críticas por la supuesta traición y la salida del Partido Revolucionario Institucional PRI, instituto que todo le ha dado a la familia Vallarta Trejo, en que el patriarca mayor es el doctor José Lucas Vallarta Robles, quien en su momento, o para ser más precisos fue candidato a Gobernador en el 1999, proceso que fue ganado por el entonces abanderado de la Alianza PAN, PRD, PT y PRS, Antonio Echevarría García.

Se trata de Jorge Vallarta Trejo, quien fuera regidor, delegado del INFONAVIT y parte importante del equipo de campaña del ex candidato a Gobernador en el 2017, Manuel Humberto Cota Jiménez, quien al igual que a Lucas, Antonio Echevarría García, hijo de Antonio ex Gobernador, les ganó la carrera por la silla de la máxima magistratura del Estado en Nayarit.

El político conocido con el mote del Peque Vallarta, después de la derrota del año anterior de su partido el tricolor y la pérdida de su cuasi hermano Manuel Cota, intentó a los meses y en la campaña que encabezó José Antonio Meade de buscar ser candidato a diputado por el PRI en el distrito primero, pero en las negociaciones lo desecharon o quizá lo vieron muy pespelaco, comparado con la mujerona Hilarla Domínguez Arvizu.

Ante esa situación el muchacho Vallarta, inquieto y arriesgado se atrevió a buscar mejores horizontes y respaldar el proyecto de Ricardo Anaya, abanderado del PAN a la Presidencia de la República, pero bajo las siglas del PRD, que lo hizo abanderado a diputado federal.
No obstante, la suerte no lo favoreció y quedó en el intento, pero como el líder moral del Sol Azteca es agradecido, buscó la manera de responder el favor y conseguir un cargo en el Gobierno del Cambio para Jorge Vallarta, mismo que se concretó este martes al ser nombrado director de Fortalecimiento Municipal en esta tierra de coras, huicholes y mexicaneros.

Tal vez la intención del Peque no era conseguir una chamba sino llegar al Congreso de la Unión, pero como en las apuestas le puso al proyecto equivocado, la jugada era por MORENA como le hicieron varios ex priístas que lograron cuajarla, incluso, muchos desconocidos se subieron al carro de la cuarta transformación, hubo caso de gentes que metieron de relleno y le pegaron al gordo sin comprar cachito.

En fin, dicen los que saben que en política no hay nada escrito, aunque es de tiempos y circunstancias, por lo que no descartemos que para el 2021 el ahora director de Fortalecimiento Municipal, Jorge Vallarta Robles, lo veamos en la lista de posibles candidatos de la Alianza PAN, PRD y PT al Ayuntamiento de Tepic, dado que el proyecto político de la familia Echevarría muere con la actual gubernatura, y veamos al Peque como contrincante de Saldate, Rivas o Castellón, que busquen ser presidentes.

En estos momentos quieren ser presidentes, pero del PRI, instituto político que en cualquier momento celebre la renovación del Comité Directivo Estatal, cargo para el que existen casi una decena de tiradores a suceder a Enrique Díaz.

Entre esos se menciona a Carlos Castillón Medina, de parte de la Confederación Campesina, al ingeniero Alejandro Rivas Contreras, Julio Mondragón, Enrique Medina Cuevas, Raúl Mercado, Trinidad Espinosa Martínez, Francisco Pérez Gómez, Neftalí Castillón Valencia, actual Secretario de Operación y Organización Política, Roberto Lomelí Madrigal y Enrique Díaz López, este último presidente interino del PRI actualmente, quien deberá separarse del cargo para poder competir en igualdad de condiciones.

Según voces al interior del PRI, en estos momentos se requiere de un dirigente y Secretario que sume, tenga simpatía con los sectores, vaya al territorio, organice y defienda a la militancia, perfil que le ven a Roberto Lomelí Madrigal, conocido con el mote del Bachis, quien podría darle otro giro a la pasividad que impera en el partido en estos momentos, ya no se diga cuándo Enrique Peña entregue el poder.

Refieren al interior del tricolor que ya están cansados de la camarilla de cuates, familiares, compadres y hasta novias y amiguitos que se sienten dueños y tienen secuestrado al instituto, aunque en el trabajo sean un cero a la izquierda, factores que ya se vieron en las dos derrotas seguidas, comentan los priístas del Sector Popular, CTM y la misma CNC.

El delegado del CEN del PRI Leobardo Alcalá Padilla, del que dicen se ponchó el camión en que venía a Nayarit, una vez acá, y encargado del proceso para elegir al dirigente, deberá tejer fino y platicar con los aspirantes a la dirigencia para sacar un candidato de unidad y evitar fricciones o posibles desbandadas de tricolores que ahora ven en Andrés López Obrador muchas virtudes, aun a sabiendas que los califiquen de chairos.