Numinor: La Sabiduría de los Refranes

Por Agustín Almanza Aguilar

07 / Noviembre / 2018

Bien han dicho los que señalan que los Refranes son evangelios chiquitos, o biblia popular. Un refrán, según los diccionarios es un dicho agudo y sentencioso de uso común en que el pueblo resume su sabiduría, su filosofía, a veces con irónicos chispazos y otras con propósitos educativos, pero siempre con fundamento de experiencia, heredada de oleadas generacionales. La gente bebe de esta fuente llena de efluvios, de emisiones, veraces, que son expresados en el momento preciso, certeramente. Un minimundo de bolsillo Lope de Vega –nos dicen– afirmaba que los refranes son todos los libros del mundo en quintaesencia; compúsolos es el uso y confirmarlos la experiencia. Veamos algunos, y provecho.

No hay grandote que no sea semillón, ni chaparro que nos sea méndigo, ni flaco que no sea bilioso, ni gordo que no sea payaso.

Si ya espinado, ¿para qué huaraches?/ No dá paso sin huaraches/ Tanto vá el cántaro al agua hasta que se quiebra/ ¿Para qué tanto salto estando el suelo tan parejo?/ ¡Ay cuero no te arrugues que te quiero para tambor!/ La cantina abierta y el cantinero dormido (sobre el cierre del pantalón)/ El que no chilla no mama/ Candil sin mecha, ¿a quién aprovecha?/ Vaca que no dá leche que no cague en el corral/ En arca abierta hasta el más santo peca.

Árbol que nace torcido jamás su tronco endereza/ Candil de la calle, oscuridad de su casa/ Enójense las comadres y salen las verdades/ No ordeñar la vaca antes de tenerla/ Cuando se trata de dinero todos son de la misma religión/ Médico, cúrate a ti mismo/ Ven la paja en el ojo ajeno y no ven la viga en el propio/ Mucho ruido y pocas nueces/ No de tanto madrugar amanece más temprano/ Si digo que la burra es parda es porque tengo los pelos en la mano/ Más vale gota que dure y no chorro que se acabe/ A caballo regalado no se le vé el diente/ No seas tan humilde; no eres tan grande/ Los yerros del médico la tierra los cubre.

Matrimonio y mortaja del cielo bajan/ En casa del jabonero el que no cae resbala/ En casa de herrero azadón de palo/ Perro que no sale no topa en hueso/ Más vale paso que dure y no trote que canse/ Al mal paso darle prisa/ Tanto peca el que mata a la vaca como el que le agarra la pata/ Agua que nos has de beber déjala correr/ De lengua me trago un plato/ Mientras descansas has adobes/ No dar patadas al pesebre/ A buena hambre no hay pan duro/ A palabras necias oídos sordos/ A chillidos de marrano, oídos de carnicero/ A quien madruga Dios lo ayuda/ Al buen entendedor con pocas palabras/ Piensa mal y atinarás/ Bien predica el que bien vive/ Del dicho al hecho hay mucho trecho.

De noche todos los gatos son pardos/ No todo lo brilla es oro/ Dime con quién andas y te diré quién eres/ Donde no se piensa salta la liebre/ Donde una puerta se cierra otra se abre/ No falta un roto para un descocido/ Músico pagado toca mal son/ El que a buen árbol se arrima buena sombra lo cobija/ Haceos miel y comeros las moscas/ Ir por lana y volver trasquilado/ La codicia rompe el saco.

Etc., etc., etc. Esperamos que os hayan agradado el rato.