José María Castañeda .-
En el poblado de Ojos de Agua, la comunidad se encuentra conmocionada e indignada por el trágico asesinato de Macario Estrada, un joven originario de la Sierra del Nayar, quien fue ultimado por desconocidos el pasado sábado.
Según habitantes del lugar, Macario llegó a Ojos de Agua junto con sus padres para trabajar en las labores del campo, específicamente en el ensarte de tabaco. Su padre, Zenón Estrada, decidió establecerse en el poblado donde la familia se dedicó a diversas actividades agrícolas, como el cuidado de ganado, ordeña y la cosecha de frijol. La comunidad apreciaba mucho a esta familia por su disposición para trabajar, especialmente en un contexto donde la disponibilidad de mano de obra ha disminuido debido a los apoyos federales que incentivan a muchos a permanecer en la sierra.
El Trágico Incidente
El pasado sábado, Macario acudió a una cantina en la Junta de Mejoras de Ojos de Agua, donde comenzó a ingerir bebidas alcohólicas. Según testigos, en estado de ebriedad, el joven sacó un machete y comenzó a tallarlo contra el empedrado, lo que alarmó a quienes estaban presentes. Alguien decidió reportar la situación a la policía, que acudió con la intención de detenerlo.
Al ser advertido de la presencia policial, Macario se refugió en su domicilio, donde permaneció hasta horas más tarde. De acuerdo con relatos de los vecinos, personas vestidas de civil llegaron al lugar, lo llamaron por su nombre desde el exterior, y al salir, Macario fue atacado. El joven cayó al suelo herido de muerte, y sus agresores huyeron del lugar.
Exigen Justicia
El asesinato de Macario Estrada ha causado un profundo dolor e indignación en Ojos de Agua. La comunidad exige que las autoridades investiguen a fondo el caso para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.