TODOS SOMOS CULPABLES

Por: Olegario Zamudio Quezada

09 / Octubre / 2014

Allá en mi León Guanajuato la vida no vale nada, decía José Alfredo Jiménez, pero creo que debió incluir al estado de Guerrero, donde la vida de las clases sociales bajas o los desprotegidos no valen nada, frente al poder que se enerva y se mancha de sangre de cara al mundo, prueba de ello son los acontecimientos reprobables del Vado de Aguas Blancas, y hoy con los hechos de los estudiantes normalistas asesinados.

Lo que acontece en Guerrero es sintomático de lo que sucede en el resto del país, y en ello se puede vislumbrar el alejamiento que hay entre la autoridad y el pueblo que la eligió en los procesos electorales para representarlos o de interpretarlos.

En el YOUTUBE existe un fragmento del video de cuatro minutos de un total de dieciocho de la MATANZA DE AGUAS BLANCAS, localizable en http://www.youtube.com/watch?v=Wut8XF07CM4 y estremece, en verdad; el hecho de que no haya un video de los acontecimientos de los normalistas no es menos impactante e irresponsable, pues no es necesario que haya un video para que se aplique la ley.

Dice una amiga que es trabajadora social, Me duele escuchar lo de los jóvenes normalistas, porque luego me traslado hasta los sentimientos y la congoja de las demás personas al perder a sus seres queridos, sus hijos, sus hermanos, sus padres.

Distinguido periodista de Tecuala del norte del Estado de Nayarit refirió, Fue una acción concertada del Estado por encubrir a una autoridad coludida con el narcotráfico...pues desde hace un año había denuncias y ninguna autoridad hizo algo, todo mundo solapó y calló, ahora piden perdón aquí la pregunta es, De que los van a perdonar???

La sociedad está en descomposición, los gobiernos en algunos de los casos, son rebasados por el crimen organizado. Este fenómeno también se puede apreciar en varios países de América Latina, y los Estados Unidos de Norteamérica, que es uno de los principales.

Pero más allá de opiniones diversas, de oraciones y plegarias de perdón arrepentido, en este México mediatizado no podemos arrancarle aun, ese cáncer social que es la deshumanización y la extinción del hombre por el hombre mismo, en un país y en un Estado que se jacta de ser un lo mejor y que lo único que le falta es un lucero.

Todos, absolutamente todos no podemos soslayar estos hechos; de alguna manera, tenemos que sentir constreñida nuestra alma ante los atroces acontecimientos. Tenemos que levantar la mano y blandir nuestra voz de alguna manera.

No podemos vivir rasgándonos las vestiduras porque cortan o podan un árbol o lastiman un gato, y en otros menesteres ser apáticos e indolentes ante un crimen de Lesa Humanidad de estas proporciones, si pues, luchar en todos los frentes y emitir nuestra voz en sociedad, pero sin dobleces.

Alguna ocasión con motivo de la muerte y asesinato de Luis Donaldo Colosio, edité videos con la información vertida en los canales de habla hispana respecto de este acontecimiento, entonces agregué, que no es necesario que haya un video por cada injusticia para que se aplique la ley.

También escribí, que en México corremos todos, el riesgo de convertirnos en un país de cínicos, un país donde el olvido, la cobardía, la condescendencia y la resignación, marquen definitiva y vergonzosamente nuestro destino.

Tengo confianza en que habrá justicia ante estos hechos. Este país, México, de cara al mundo, tiene que mostrar justicia. Esta llegara, más pronto que tarde. Llegará y servirá ello como indicador y parte aguas del México que queremos e idealizamos en paz y armonía, porque estos chamacos puedo decirlo de cara al cielo, no están muertos, ni los están enterrando, los están sembrando y van a florecer. Pues.