Estado de los ESTADOS: Bronco empuja a partidos al cambio

Por Lilia Arellano

09 / Junio / 2015

El triunfo de Jaime Rodríguez Calderón, alias El Bronco, primer candidato independiente que se convertirá en gobernador en Nuevo León y en también el primero en todo el país, constituye un parteaguas en la vida política de México. Sin duda alguna que lleva a los partidos políticos a reflexionar profundamente en su plataforma electoral y en la forma de comportarse al llegar al poder frente al electorado. Exhibe que la partidocracia que se ha enquistado en el poder no es insustituible, ni indispensable. La alta votación que recibió su candidatura independiente demuestra que hay un hartazgo de la sociedad por los partidos políticos. Señala indiscutiblemente que la sociedad tiene el interés y el poder de influir y marcar con su voto el destino del Estado.

Tres han sido los grandes triunfadores de la contienda del domingo, misma que se guardó para el último minuto algunas sorpresas. Sin duda que el abstencionismo registró el mayor porcentaje; Jaime Rodríguez el bronco, obtuvo muchos más sufragios de los esperados; Morena dio el gran salto al quedarse con un importante número de simpatizantes en la capital de la República ya que al ganar al menos 5 delegaciones sin la compra de un solo voto y captar otros tantos millones de sufragios en el resto del país, se le abre un escenario prometedor al considerar que, como partido político es reciente y que entre sus haberes también cuenta el que se hubiese convertido en segunda fuerza política en algunas Entidades. Una de las sorpresas ha sido la presidencia municipal de Cuernavaca que queda en manos del futbolista Cuauhtémoc Blanco.

A los números y triunfos anunciados a través del PREP habrá que agregarles que crece el número de votos nulos, muchos de ellos no son producto de fallas del votante sino que fueron emitidos con ese propósito, con el de anularlos con leyendas que lo mismo hablaban de Abarca que exigían la presentación con vida de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa. Para el INE nada satisfactorio resulta que sean las redes sociales, el medio que ya ha ganado gubernaturas en México y hasta la presidencia de los Estados Unidos, señalen que es falso el porcentaje de ciudadanos que acudieron a las urnas y que tal cúmulo de sufragios obedece al embarazo que se hizo en ellas auspiciado por las tres principales fuerzas políticas participantes quienes también se distinguieron por la compra de votos en 500 y mil pesos por uno.

Los dos grandes perdedores han sido el Partido del Trabajo y el mismísimo PRD a quienes la paliza que les dieron en el Distrito Federal es la más clara muestra de que los chuchos solo llegaron a su dirigencia para enterrarlo. Tal vez el gran error del PT en un medio en el que se practica la política chapucera y no se respeta el pensamiento opositor, fue no levantar el dedo para aprobar cualquiera de las reformas planteadas por Enrique Peña Nieto. Hay que resaltar que fue el único que no aprobó ninguna de ellas y, paradójicamente es el que se queda fuera. El Humanista, al no obtener el registro nuevamente, no pierde nada porque, simplemente, no eran nada. Encuentro Social tiene tras de sí a grupos de interés que sin duda serán útiles al mandato en turno y de ahí su probable permanencia.

El Congreso en su nueva conformación, tendrá que hacer una revisión a fondo de la actual legislación electoral pues permite que sólo las propuestas de la partidocracia se analicen y se aprueben en el Congreso de la Unión, dejando de lado la participación de la sociedad.