REDESCUBRIENDO: Hijos Exigentes, Padres Obedientes.

Por: José Miguel Cuevas Delgadillo

17 / Septiembre / 2015

La forma de educar a los hijos se ha modificado. Hace algunas décadas la formación era más autoritaria, rígida y con poco afecto. En la actualidad los roles de la forma de ejercer la paternidad y maternidad han cambiado. Ahora vivimos el extremo contario: el consentimiento excesivo de los hijos. Nos hemos convertido en padres, por lo general, consentidores y permisivos, lo que ha provocado una conducta exigente en nuestros hijos. Es vergonzoso como algunos padres no pueden controlar a sus pequeños hijos, a los pequeños tiranos. Hoy más que nunca los padres nos cuesta trabajo ejercer nuestra autoridad paternal. Si algo debemos retomar de la antigua forma de educar, podemos mencionar que la exigencia, los límites y la austeridad son tres pilares que no debemos desechar. La exigencia con prudencia, es decir, enseñar a nuestros hijos a cumplir con sus responsabilidades de acuerdo a su edad y capacidad, pienso que todos los niños de 5 años pueden recoger sus juguetes, tender su cama y llevar su plato y vaso al fregadero. Los límites de conductas, acciones y pretensiones de los hijos lo deben poner los padres y madres, no los hijos. El asunto de la austeridad es muy importante en nuestros días, hoy educamos a nuestros hijos con el siguiente principio: le voy a dar a mi hijo todo lo que no tuve de niño, no quiero que nada le falté a mis hijos. Muchos padres y madres nos preocupamos por darle a nuestros hijos todo lo material: celulares sofisticados, laptops, pantallas de plasma, etc. Debemos enseñar a nuestros hijos que no siempre es posible darles lo que piden. Cuantas veces sedemos a las pretensiones de nuestros hijo, o en algunos casos exigencias, para evitar que el niño llore o no sea lastimado en su autoestima, con esta postura terminamos formando hijos tiranos, controladores de sus padres, lo que provocará que el niño no toleré que le nieguen sus deseos y exigencias, fomentando una conducta de intolerancia a la frustración, altamente sentimentales. ¿Qué debemos hacer para evitar que mi hijo se convierta en un niño tirano? A continuación lo resumimos en los siguientes puntos:

1. Proveer de un ambiente creativo y constructivo.
2. Disciplina con amor.
3. Establecimiento de reglas simples y claras.
a) Presentar la regla;
b) Explicar por qué se estableció;
c) Explicar para qué la regla;
d) Delimitar la regla en casa.
4. Implementa consecuencias naturales y razonables frente a conductas irresponsables.
5. Proveer ambientes positivos.
6. Enseña a competir y a colaborar.
7. Rechazo de la conducta no de la persona.

Hasta la próxima. Terapeuta Familiar. Consultas al 311 136 89 86.