Comenzaron los coyotes pagando el azufrado a 20 pesos y ahorita anda en 15

26 / Enero / 2018

Por José María Castañeda

Santiago Ixcuintla, Nay.- La comercialización del frijol camina como los cangrejos, dijo en entrevista el ex comisariado ejidal del poblado de Pozo de Ibarra, Ricardo Mariscal, luego que dijo algunos campesinos que sembraron temprano ya fainearon y trillaron su frijol, y añadió: un campesino de mi poblado de origen desgranó 3 hectáreas de frijol azufrado y vendió la tonelada a razón de 20 mil pesos. Y 5 días más tarde volvió a trillar y ya para entonces vendió a 18 pesos el kilo del frijol de la misma variedad, es decir azufrado, y tres días después volvió a trillar una parte que le quedaba y el mismo comprador adquirió su frijol a razón de 15 mil pesos la tonelada, manifestando que en menos de 22 días su frijol fue adquirido perdiendo un cuarto de su valor primario.

En ese tenor entrevistamos al chaparrito director del rastro municipal quien dijo: Mira, los acaparadores del grano comenzaron pagando muy barato, el primero que trillo en Ibarra vendió a 20 pesos el azufrado, a los 3 días trillo otro pedazo y se lo compraron a 17 pesos el kilo y posteriormente el mismo comprador adquirió el grano pagándolo a 17 pesos el kilo, y de ahí a ido para abajo, y para abajo, el precio del frijol azufrado. De los demás frijoles han trillado poco, anoche me dijeron que el precio del pinto saltillo lo andan comprando a razón de 13 pesos, y pues con tantos gastos que hace el productor no se vale que jueguen con su necesidad. No hay orden en cuanto a los precios y como siempre Ibarra, es quien sufre las consecuencias y los ejidos de los alrededores como Valle Morelos, Pozo de Villa el Limón, y Cuamiles.

Al preguntarle a Ricardo Mariscal si los coyotes eran de esta ciudad, dijo: Mira, la mayoría de los coyotes que andan comprando el frijol vienen del estado de Jalisco y de Tepic, pero lo que más nos daña es que los mismos que consiguen ahí en Pozo de Ibarra, vamos a llamarlo así, a los intermediarios es que somos los Ibarreños, quienes les decimos a los coyotes: ‘Mira, fulano tiene 3 toneladas. Ok, dice el comprador, vamos a tratarlo o trátalo tú’, y va el intermediario. Y pese a que el coyote les dice cómpralo a 16 pesos el kilo, el intermediario va y ofrece un precio de 15 pesos; por lo que con esta machicuepa el intermediario gana un peso por cada kilo, más el porcentaje que le haya ofrecido por implementar el canibalismo entre sus hermanos de clase. Esto es una cadena donde gana el coyote, gana el intermediario y gana el acaparador, mientras que el productor del grano básico es el que menos gana y ninguna autoridad gubernamental te protege, ni federal ni estatal. Citó finalmente Ricardo Mariscal, ex comisariado ejidal de Pozo de Ibarra.