Brotan las pistas clave en homicidio de colonia Amado Nervo

11 / Junio / 2014

Por Oscar Verdín Camacho

Horas después de que su yerno Ernesto Ramírez Pelayo fue asesinado de un balazo en la cabeza, mientras dormía en la segunda planta de su casa en la colonia Amado Nervo, la señora Ramona Miramontes rindió una declaración ante un agente del Ministerio Público que en breve puso en alerta a los agentes respecto a la posibilidad de que, metafóricamente, el enemigo pudiera estar en casa.

Mamá de la ahora detenida Daniela Dolores Bautista Miramontes -quien ratificó ante el Juzgado Primero Penal la planeación del homicidio de su esposo, ingeniero civil de 41 años y socio del Grupo Constructor Pelayo-, la señora Ramona dormía en otra habitación de la finca con una nieta, cuando se despertó al escuchar un fuerte ruido y a su hija que gritaba. Instantes después se topó con un desconocido que le apuntaba al estómago con una pistola, al tiempo que le exigió un ¡cállate! en tres ocasiones, cuando ella cuestionó a su hija qué estaba pasando.

El desconocido, descrito como cejón y alto, bajó por la escalera del interior de la casa y salió por la puerta principal, añadió la testigo, quien luego avisó de lo sucedido a otro de sus hijos, vecino cercano, pero Daniela le pidió que no le abrieran porque el maleante podía estar en la parte de abajo. Sin embargo el familiar ingresó puesto que la puerta quedó abierta.

De acuerdo con las constancias respectivas, un día antes, domingo uno de junio, la citada familia estuvo en playas de San Blas y regresaron por la tarde. Ernesto fue el primero en irse a dormir, después de cenar y darse un baño. Daniela, en cambio, se quedó a limpiar la cocina.

Por cuestiones de seguridad, la puerta principal contaría con pasadores que se colocaban durante la noche pero que Daniela no los puso ese domingo, se conoce ahora. Por el contrario, habría entregado copia de la llave a los involucrados en el asesinato de su esposo.

De igual forma, la declaración ministerial menciona por primera vez a Leopoldo Ricardo Real Núñez, primo de Daniela y quien hace tiempo estuvo viviendo con ellos. Acababa de llegar de Puerto Vallarta, trabajaba como taxista, pidió alojamiento y se lo dieron.

De 21 años, Real Núñez fue detenido en Jalisco por la policía de esa entidad, a petición de la Fiscalía General de Nayarit.
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Transcurridas unas horas del homicidio, policías de la Agencia Estatal de Investigación tenían un perfil de la citada pareja en la que Daniela no salía bien librada. Incluso, contactaron a un individuo que aceptó que anteriormente tuvo un romance con ella, pero no hubo elementos en su contra. También se confirmó que recientemente había pedido prestado 10 mil pesos, como parte de los 40 mil que supuestamente pagaría por el crimen.
La bala que causó la muerte de Ernesto Ramírez penetró en el lado derecho de su cabeza.

La inspección en la finca número 45 de la calle Francisco González Bocanegra llevó al aseguramiento de dos guantes presuntamente usados por uno de los homicidas. Y una diligencia posterior, presumiblemente de cateo, llevó al aseguramiento de un ticket de compra por unos guantes de látex en Farmacias Guadalajara de Calzada de la Cruz, a las 10:30 de la noche del domingo uno, horas antes del homicidio.

De acuerdo con datos recogidos, un empleado de la farmacia aceptó ministerialmente haber vendido unos guantes –tomando en cuenta que en el ticket está su número de trabajador-, pero consideró que le era imposible identificar al cliente por la gran cantidad de personas que acuden todos los días.

Se presume que el comprador habría sido Leopoldo Ricardo o bien Édgar Alan Lerma Villa, de 19 años, también detenido.

La investigación de la Fiscalía General presume que Lerma Villa es el sujeto que disparó contra el ingeniero civil la madrugada del dos de junio y con quien se topó la señora Ramona instantes después, amenazándola y exigiéndole que se callara. En una diligencia ministerial, se le pidió que levantara la voz y repitiera tres veces ¡cállate!. La señora lo identificó.
Édgar Alan mide algo más de un metro con 90 centímetros.

Con la ratificación judicial de los tres citados de que participaron en el homicidio, seguramente esta semana será dictado auto de formal prisión dentro del número de expediente 484/2014.
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